El lema es rotundo, sin duda. Y consigue lo que busca. Que los profesionales de la Enfermería se fijen, lo analicen y, en casi todos los casos, lo apliquen, se sumen al mismo y multipliquen su efecto. La burgalesa Azucena Santillán, profesora en la Escuela de Enfermería y bloguera pionera de la enfermería basada en la evidencia puso a rodar hace unos meses en su página web la imagen de un conocido personaje infantil de los años 70, Pipi Calzaslargas, con la frase: «Soy enfermera y me la pela si ‘siempre se ha hecho así’». Con esta tajante sentencia, que quizás algunas personas no consideren del todo cortés, quiso poner de relieve que aún existen muchas prácticas en los cuidados enfermeros que se llevan a cabo por la fuerza de la costumbre y que sería conveniente ir cambiándolas por otras que están científicamente comprobadas. Así, lo que fue un objeto viral se ha materializado en el mundo ‘real’ en unas chapas que muchos profesionales (también médicos, matronas y fisioterapeutas)ya lucen en sus uniformes de trabajo.
La propia Santillán reconoce estar sorprendida de la repercusión que ha tenido el tema tanto en las redes sociales como en los hospitales y centros de salud porque cada día recibe multitud de llamadas de compañeros que quieren colgarse la chapa de Pipi en las batas. En internet la etiqueta #MLPela está siendo utilizada por cientos de tuiteros «para expresar prácticas rutinarias que les gustaría cambiar porque se han quedado obsoletas y la evidencia científica ha demostrado que es deseable transformarlas», en palabras de Santillán; el vídeo del mismo título ha recibido más de 4.000 visitas a los pocos días de su publicación, su página web ebevidencia.com tiene decenas de comentarios de apoyo y la imagen ha sido adoptada por los perfiles de mucha gente en las redes sociales.
Santillán explica que la enfermería basada en la evidencia es una forma de aplicar los cuidados basándose en los últimos resultados de la investigación científica: «No es una Enfermería que se apoya en experiencias, en costumbres ni en creencias sino en rigor científico. Todos los sistemas de salud han empezado a trabajar ya según estándares de calidad y en prácticas basadas en la evidencia y a los profesionales nos gustaría que la Administración fuera algo más flexible para que esto se extendiera». Esta profesional es consciente de que a veces es difícil aplicar estos resultados de la investigación debido a las resistencias al cambio de algunos profesionales «y por las dificultades del sistema».
Para los no iniciados, pone un par de ejemplos de enfermería basada en la evidencia: «Siempre se ha mantenido a las mujeres durante el trabajo del parto a dieta absoluta cuando Guiasalud, la biblioteca de guías de práctica clínica del sistema nacional de salud, recomienda administrar líquidos y si son bebidas isotónicas mejor. Y con los neonatos, en condiciones normales, las ultimas investigaciones recomiendan la cura seca para el ombligo en lugar de la cura realizada con antiséptico». Otra cosa es que se apliquen.
En cualquier caso, Santillán cuenta con apoyos tan especiales dentro de la profesión como el de Pilar Tazón, presidenta de la Conferencia de Directores de Enfermera y directora de la Escuela Universitaria de la Universidad del País Vasco o el de Zulema Gancedo, directora de Enfermería del Hospital Marqués de Valdecilla de Santander.