Dos ausencias que dejan por tanto a Ángel Viadero con solo dos directores de juego disponibles, Prosi y Pepe Delgado, y que en el caso de este último podría suponer su oportunidad de ser titular por vez primera en lo que se lleva de temporada.

El jugador tinerfeño de 22 años llegó al Burgos el pasado verano tras quedar libre en Las Palmas Atlético convirtiéndose en una de las apuestas de futuro del nuevo entrenador blanquinegro, aunque hasta ahora solo ha podido jugar en dos partidos de Liga, 21 minutos ante el Valladolid B y 17 el pasado domingo ante el Tudelano, y nunca ha sido titular.

De hecho, las bajas seguras de dos jugadores de su misma demarcación como Zarandona y Rodri, tampoco le llevan a Pepe Delgado a verse de momento como titular ante el Lealtad. «Aún es pronto para decirlo. Está claro que la posibilidad existe debido a la baja de dos compañeros, pero hasta que el míster no dé la alineación el día del partido, no me veo como titular», afirmó ayer.

Lo que sí que reconoce el centrocampista canario es que tras siete jornadas ya disputadas esperaba haber jugado algo más. «Así es, pero las cosas se han dado de forma diferente y solo me queda seguir trabajando, seguir luchando y aprovechar las oportunidades que me lleguen, bien sean desde el banquillo o como titular».

 

Quita presión.

Centrado, al igual que sus compañeros, en el duelo de mañana ante el Lealtad, Pepe Delgado no cree que el Burgos llegue al partido presionado tras llevar dos derrotas seguidas. 

«No creo que eso nos obligue necesariamente a ganar, ya que la temporada no ha hecho otra cosa que empezar. Está claro que nuestro objetivo es estar arriba y para ello tenemos que volver a ganar, pero lo importante es que miremos por nosotros y volvamos a ganar la confianza que teníamos. El trabajo se tiene que ver en enero o febrero, y que lleguemos a esos meses en buena posición».

Por eso Pepe Delgado insta a la afición a no dejar de creer en el Burgos. «Esto es un bachecito de nada. Lo importante es que no perdamos la ilusión y las ganas, y el equipo quiere y trabaja duro para mejorar, así que tranquilidad».

 

Rodri, Fito Miranda y Jonatan Valle, bajas seguras

Eran las 12 en punto del mediodía cuando la plantilla del Burgos comparecía ayer en el césped de El Plantío tras haber estado dos horas en los vestuarios recibiendo consignas por parte de su entrenador, Ángel Viadero. Su fin, corregir los errores que han llevado al equipo a cosechar sus dos últimas derrotas ante el Cacereño y el Tudelano.

Tras la ‘moralina’, ligera sesión de entrenamiento en la que no tomaron parte Fito Miranda, Rodri y Jonatan Valle, todos por lesión. De hecho ninguno de ellos podrá jugar mañana ante el Lealtad.

Rodri sigue sin recuperarse del golpe en la cadera que sufrió la pasada semana y se limitó a realizar un poco de carrera continua, bicicleta estática y trabajo en el gimnasio. Fue baja ante el Tudelano y lo será en Villaviciosa.

Fito Miranda ni tan siquiera saltó al campo tras recaer de una rotura fibrilar en el recto anterior. Se le realizó el pasado miércoles una nueva ecografía que desveló que tiene que seguir con su tratamiento de rehabilitación.

Por último, Jonatan Valle, que arrastra una rotura muy pequeña en el vasto externo, lesión producida en su debut del domingo ante el Tudelano, calentó con el grupo pero luego se limitó a correr en solitario y poco más.

En definitiva, tres bajas seguras para mañana que se unen a la ausencia de Iván Zarandona, convocado con Guinea Ecuatorial, y que dejan al Burgos con los 16 jugadores justos para el choque de mañana. 

Dieciséis porque afortunadamente el canterano Sergio Esteban se ha recuperado de la lesión que sufrió ante el Guijuelo y que le ha hecho perderse los encuentros frente al Cacereño y el Tudelano.