La unidad de referencia de cirugía pediátrica del Hospital Clínico de Valladolid, cuya orden de creación ha sido anulada por el TSJ, seguirá funcionando y, por tanto, prestando atención médica a pacientes de Valladolid, Palencia y Segovia. Así lo ratificó el gerente regional de Sacyl, Eduardo García Prieto, tras la sentencia publicada este jueves por Diario de Burgos y que ha dado la razón a tres médicos del Yagüe que recurrieron en 2010 la designación del Clínico como centro de referencia infantil al considerar que mermaría considerablemente la actividad asistencial del hospital burgalés.
García Prieto explicó a este periódico que la resolución judicial no tendrá «ningún efecto práctico» dado que la unidad de referencia de Valladolid no se va a cerrar. «Esa unidad seguirá funcionando porque nadie pone en cuestión su creación. Lo que la sentencia pone de manifiesto es un defecto de forma», dijo. En este sentido, el gerente de Sacyl subrayó que la resolución del TSJ anula el anexo de la orden que organizaba la atención especializada en la Comunidad Autónoma, y lo hace -dijo- porque ese anexo se basaba en un decreto que a su vez fue anulado por un problema de tramitación dado que no había sido negociado en mesa sectorial y se consideró que tal reordenación de las zonas básicas de salud podía afectar a las condiciones laborales de los trabajadores.
Para resolver el problema que ahora se ha creado, la Junta de Castilla y León trabaja en la redacción de un nuevo decreto de ordenación del sistema sanitario y en el desarrollo de una orden para atención especializada. Con ello, se daría cobertura legal a la unidad del Clínico de Valladolid.
Además, según añadió Prieto, Sacyl presentará un recurso de casación ante el Supremo de la sentencia ahora conocida.
Hasta tener el nuevo decreto, el Gobierno regional mantendrá los servicios actuales y que, según el gerente, no han sido puestos en entredicho por el tribunal. «Hay una instrucción interna, de 2006 y anterior a lo anulado, que establece los criterios de derivación y con el cual trabajamos ahora a la hora de mandar un paciente a determinado hospital, dentro o fuera de la Comunidad», señaló.
Por su parte, el abogado que ha llevado la demanda de los tres médicos de Burgos, Alfonso Codón, precisó que esperarán a ver los pasos que da la Consejería de Sanidad antes de pronunciarse o tomar nuevas medidas procesales.
Codón coincide en que la sentencia no profundiza en la calidad de los servicios, no cuestiona la atención o los recursos, ni siquiera la distribución provincial sino que considera nula una orden que se basaba en un decreto invalidado previamente.