AJE premia el trabajo de Sara Barriuso y Jorge Villaverde

B.G.R. / Burgos
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La asociación burgalesa reconoce la iniciativa innovadora y la proyección empresarial de estos dos jóvenes emprendedores en su gala anual de entrega de galardones

Foto de familia de los finalistas de los premios con el presidente del colectivo en el centro. - Foto: Luis López Araico

De todos los finalistas se ha destacado su fuerza, vitalidad, arrojo, constancia y creatividad. Pero en el caso del ganador del IX Premio Joven Empresario, el jurado ha resaltado la trayectoria de Jorge Villaverde al frente de su empresa de mobiliario, desde 1998, y la proyección de futuro. Y en el del IV Premio Joven Iniciativa Empresarial, ha sido la innovación lo que ha llevado a Sara Barriuso, con su proyecto de externalización de redes de venta y diseño comercial, a llevarse el reconocimiento de AJE.

La Asociación Jóvenes Empresarios de Burgos entregó ayer sus galardones anuales en una gala celebrada en la Casa del Cordón. Minutos antes y después de una jornada de visita a las empresas, su presidente, Santiago Serna, quiso subrayar la energía de los seis emprendedores que han llegado a la  final. «Ninguno hablaba de crisis», aseguró en referencia a los jóvenes empresarios más asentados en el mundo laboral, si bien subrayó los problemas de financiación que existen actualmente y  exigió «abrir el grifo» del crédito.

La experiencia de los veteranos sirve de ejemplo para todos aquellos que empiezan. Y a estos últimos, a los que acaban de iniciarse en el mundo de la empresa o quieren hacerlo como alternativa al desempleo, Serna aconsejó no dejarse vencer por el miedo a emprender, aunque también les recomendó «tener las ideas muy claras». Y por eso, habló hacer un buen plan de negocio, buscar la diferencia y ser previsores.

El jurado decidió que Jorge Villaverde y Sara Barriuso fueran los ganadores de sus respectivas categorías en esta edición. Pero junto a ellos había otros nombres como los de Alejandro Bárcena, que antes de acudir a la gala había inaugurado su tienda de soluciones de informática, o Beatriz Santamaría, que explicaba encantada cómo funciona su restaurante La Esencia de Burgos, en el que lleva trabajando apenas un año y medio.  Estos dos jóvenes completaban junto a Barriuso la candidatura del Premio Iniciativa Empresarial.

Y hay más. Vanessa Mediavilla Vicente contaba con orgullo, y sintiéndose ya recompensada por estar entre los finalistas, los once años que lleva al frente de la Escuela de Música Ritmo, una empresa en la que trabajan 17 personas. La candidatura de Joven Empresario se completaba con Rubén López y su empresa de montaje y aislamiento, que con 14 trabajadores ya piensa en abrirse puertas más allá de Burgos debido al parón de la construcción.