De nada han servido las protestas de los ayuntamientos por donde pasa la línea Santander Mediterráneo. Los operarios de Adif se emplean a fondo en estos días en las labores de desmantelamiento de las vías, dando al traste con la ilusión de muchos pueblos de poner en marcha una línea férrea entre Burgos y Soria. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias ha retirado ya un 20% de los raíles y traviesas del tramo entre Cojóbar y Cabezón de la Sierra, algo más de 14 kilómetros de los 67 de que consta esta línea. Los trabajos se han desarrollado ya al paso de esta vía muerta por Modúbar de la Emparedada, Revillarruz, Los Ausines y Revilla del Campo.

Está previsto que en el último trimestre del año finalicen todos los trabajos de la línea Calatayud-Cidad Dosante. En realidad, en Burgos solo resta por desmantelar la estructura entre Cojóbar y Cabezón. En 2003 el Ministerio de Fomento retiró las vías entre ese último municipio y Hontoria del Pinar -último pueblo antes de llegar a Soria- y entre Cojóbar y Cidad Dosante, en el inicio del túnel de la Engaña (Estacas de Trueba).

La intención de Adif es dejar en las mejores condiciones posibles la plataforma con el fin de que ayuntamientos, asociaciones, consorcios, etc, lo tengan más fácil si quieren poner en marcha vías verdes. Asimismo, por razones de seguridad, Fomento va a clausurar los accesos a los puentes que se encuentran en mal estado y suponen un peligro para la seguridad de los habitantes. Va a revisarlos todos, pues la estructura metálica de que están fabricados no están en buenas condiciones en todos los tramos, señalan desde Adif. Muchos vecinos de las localidades pasean por ellos y podrían sufrir algún accidente. Aunque se clausuren, reconocen desde el Administrador de Infraestructuras, será difícil conseguir que nadie pasee por ellos.

El Adif no tiene conocimiento aún de que exista interés de la Diputación, ayuntamientos o asociaciones por explotar para el turismo la línea Santander Mediterráneo en el tramo entre Cojóbar y Cabezón de la Sierra, pero parece el único aprovechamiento posible para esta infraestructura. Más después de que Fomento haya cerrado la puerta a usar la infraestructura para poner en marcha una eventual línea férrea entre Burgos y Soria, tal como piden algunos municipios.

El proyecto de revitalización más avanzado es el que se pondrá en marcha entre Rabanera del Pinar y Barbadillo del Mercado, en  un tramo de la línea que ya se quedó sin vías hace una década. ‘Un tren de cine’ recorrerá 20 kilómetros, pasando por Cabezón de la Sierra, Castrillo de la Reina, Salas de los Infantes y La Revilla. Se trata de una exposición fija y móvil en varios puntos del trayecto recordando escenas de películas como Doctor Zhivago, El bueno el feo y el malo, El milagro de P. Tinto o Las Petroleras. Pero también ofrecería otros recursos turísticos como el Museo de los Dinosaurios de Salas y los árboles fósiles de Hacinas.

El proyecto Ecorraíl data de 2001 y contempla explotar para el turismo otros tramos de la Santander Mediterráneo situados al norte de la provincia, tales como los que separan Oña y Trespaderne o Villarcayo y Cidad Dosante. La antigua ruta férrea serviría para conocer el patrimonio natural, artístico, histórico y gastronómico de la comarca.

En la actualidad, las vías verdes parecen la salida más sencilla para aprovechar la línea. De hecho ya hay dos en marcha, la que comienza en San Pedro y San Felices, continúa hasta el Parque Europa y llega a Cojóbar. Entre Santaelices y La Engaña hay otro.