Las infraestructuras siguen siendo la gran preocupación del empresariado de cara al futuro industrial en la provincia. Así volvió a quedar patente ayer al reivindicarse el tren de mercancías directo con Madrid como una de las claves que pueden marcar el desarrollo económico de Burgos.

Así lo reclamaron el presidente de la Confederación de Asociaciones Empresariales (FAE), Miguel Ángel Benavente y el presidente de la Cámara de Comercio, Antonio Méndez Pozo, quienes destacaron la importancia de esta línea para ganar en competitividad y como atractivo para traer nuevas empresas. Y porque también, tal y como explicó el gerente de Asercomex Logistics, Ignacio San Millán, puede significar abrir una conexión con un puerto como el de Algeciras, que está siendo el referente en las rutas con el continente asiático. Ahora, sin embargo, los trenes llegan desde la localidad andaluza hasta Madrid y ahí se hace necesario, con el incremento de costes que conlleva, cambiar de medio de transporte.

El presidente de la Cámara fue más allá al destacar la importancia de luchar porque Burgos participe en el eje del corredor multimodal que  comunique Lisboa y Oporto con Irún y, a partir de ahí, con el resto de Europa.

El secretario provincial de CCOO, Juan Ignacio Ruiz, culpó a la Junta del retraso del Parque Tecnológico, criticó a la Administración regional de tratar con más mimo a Valladolid y San Millán, por su parte, reclamó que se potencie el aeropuerto de Burgos como una infraestructura para el transporte de mercancías.

Más allá de las comunicaciones, otro de los grandes temores que flotó en el ambiente y que preocupan es el problema que la despoblación puede tener para la industria burgalesa. Así lo puso de manifiesto el rector de la Universidad, Alfonso Murillo, y el director de Responsabilidad Corporativa de Pascual, Francisco Hevia.

Pese a estos problemas, los protagonistas de la charla destacaron la importancia por apostar por el potencial humano de los burgalesas y reclamaron que se potencie el emprendimiento. Así lo hicieron el director general de Benteler, Ricardo García, y también el director general de Adisseo España, Pablo Domenech, quien destacó que mientras «la innovación y la competitividad se pueden copiar, el capital humano no».

El presidente de FAE propuso la creación de un observatorio de inversión de la comunidad que sirva para saber «cuántas empresas quieren instalarse» en la región, cuántas lo han hecho y dónde y porque otras se han echado para atrás.