El dato de 13.538 personas menos en las colas de los servicios de empleo es motivo de orgullo para el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que calificó ayer de «magnífico» el descenso de las cifras de paro y la afiliación del mes de febrero y aseguró que éstas confirman «con absoluta y meridiana claridad» que se puede alcanzar el objetivo de crear tres millones de puestos de trabajo en los próximos años.

En una rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa junto al presidente colombiano, Juan Manuel Santos, el líder del Ejecutivo recordó que el objetivo de esta legislatura es tener el «mínimo» paro posible. En este sentido, reiteró que entre 2014 y 2015 se generarán un millón de empleos.

«En los años siguientes habría que trabajar para llegar a los 20 millones. Y los datos que hoy (por ayer) hemos conocido nos dicen con absoluta y meridiana claridad que ese objetivo de crear tres millones de empleos se puede alcanzar», aseveró el popular.

Rajoy también indicó que los números del desempleo y afiliación de febrero también transmiten otro mensaje: que España debe «perseverar» y mantener la política, con reformas estructurales, porque «eso es lo que llevará a la creación de nuevas ocupaciones».

«Con ese millón de empleos entre el pasado ejercicio y el presente, estaremos iniciando una senda muy positiva», concluyó.

Durante su alocución ante la prensa, el presidente tocó más palos de la actualidad y minimizó que el sondeo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) no le diera ganador del Debate sobre el estado de la Nación, ya que, según argumentó, ha participado en nueve sesiones de este tipo en el Congreso y, «según las encuestas», solo ha salido triunfal de uno y «por la mínima».

«El problema será mío porque no se me ocurre otra persona distinta a la que endosárselo», apuntó en referencia al 21,7 por ciento de apoyos que recibió el secretario general del PSOE Pedro Sánchez, frente al 21 por ciento que aseguró apoyar al presidente. «En cuanto a las encuestas, en realidad, no tengo ninguna explicación», manifestó, y subrayó que «lo importante» es que se creen en España «esos tres millones de puestos de trabajo» que anunció.

También calificó el presidente del Gobierno, en otro orden de cosas, de «tremendamente negativo» el fraude en los cursos de formación en Andalucía y subrayó que eso no transmite una «buena imagen de los gestores».

Así se pronunció al ser preguntado sobre si los nuevos datos sobre irregularidades en los cursos de formación pueden influir en la campaña electoral para las elecciones andaluzas del 22 de marzo. Rajoy dijo desconocer «qué tipo de incidencia» puede tener esa información en una convocatoria electoral, pero subrayó que sí que tiene una «influencia muy negativa para todas aquellas personas a las que iba destinado el dinero» de estas partidas, ya que, «en muchos casos» no se hicieron esos cursos.

A renglón seguido, Rajoy aseguró que, en el futuro, lo que van a hacer es «cambiar el sistema de formación» en el país, tal y como anunció también en el Debate sobre el estado de la Nación celebrado en el Congreso.

Visita de Estado. Rajoy fue ayer el anfitrión del presidente de Colombia, José Manuel Santos, que acabóa ayer su visita oficial al país. Así, los dos Gobiernos suscribieron cinco acuerdos de colaboración que actualizan la colaboración bilateral en los campos político, de la cooperación al desarrollo, la cultura, el transporte aéreo y en el área de las instituciones penitenciarias.

Asimismo, los dos dirigentes rechazaron las acusaciones en las que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunciaba la existencia de un supuesto «eje Madrid-Bogotá-Miami» que conspira contra Caracas. «Desde Bogotá no hay ningún complot. Si lo llego a descubrir, será castigado con la contundencia que nos permite la ley, pero no he podido detectar ningún complot para tumbar ningún Gobierno y (de haberlo) no lo permitiría», señaló Santos.

El mandatario latinoamericano también se refirió al conflicto local en su país y aseveró que abordará con Estados Unidos la posible suspensión de las solicitudes de extradición de guerrilleros de las FARC «cuando se avance lo suficiente» en el proceso de paz.

«Cada tema tiene su momento y su lugar y me corresponderá a mí plantear un tema que es complejo, difícil», determinó.