El comisario Villarejo contradice a González y le demanda por injurias

AGENCIAS
-

El mando policial niega que intentase chantajear al dirigente regional y explica en su denuncia que el líder 'popular' le solicitó ayuda para ocultar informaciones sobre su ático de Marbella

El caso ático, archivado por los tribunales al no apreciar ilegalidad en la actuación de Ignacio González, sigue coleando y acorralando al presidente de Madrid que, pese a todo, se niega a dar un paso atrás y sigue repitiendo como un mantra que él está dispuesto a encabezar la candidatura del PP a las próximas elecciones regionales de mayo. Si lo hace o no dependerá de Mariano Rajoy, que tendrá que decidir si a su partido le conviene tener a un aspirante demandado por un comisario de la Policía que le acusa de denuncia falsa, amenazas, coacciones, injurias y calumnias.

Un día después de la rueda de prensa del líder madrileño en la que se defendió de las acusaciones de El Mundo, asegurando que dos mandos policiales trataron de chantajearle en el marco de la investigación sobre su ático de Marbella, uno de los aludidos, el comisario José Manuel Villarejo, acudió al Tribunal Superior de Justicia de Madrid para rebatir por la vía jurídica la historia del popular. Así, según su versión, González se limitó a solicitarle a él y a otro compañero «ayuda para que no trascendiera que era el inquilino de una sociedad offshore».

«Lejos de colaborar con la investigación policial que se estaba llevando a cabo sobre el famoso dúplex, estuvo más interesado en saber la identidad de las personas que habían vinculado dicho ático con la operación de Arganda, relacionada con una recalificación de terrenos en el municipio madrileño», señala el agente. Asimismo, subraya en su denuncia que, según sus pesquisas, el inmueble lo pagó «un afamado empresario vinculado al fútbol» del que no cita el nombre. Fuentes conocedoras del caso afirman que se refiere al productor de cine y presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo.

«Niego categóricamente aquí y dónde sea necesario que haya existido chantaje alguno ni por mi parte ni por la del comisario García Castaño al señor González», reza la denuncia. Según explica, «lo único» que hicieron «fue solicitar de manera discreta la posibilidad de que el presidente acreditara el vínculo que le unía a dicho ático».

Villarejo sostiene que recibió la «autorización de sus superiores para celebrar tal cita» y califica como «rigurosamente falso que a la reunión asistiera acompañado de cuatro colaboradores, salvo que estos estuvieren investidos de una capa milagrosa que les diera el poder de la invisibilidad o estuvieran apostados cerca del lugar donde se celebró el encuentro, pero en todo caso ajenos a la reunión».

Ruido mediático. Ajeno a esta denuncia, el mandatario autonómico hizo hincapié en que el «ruido mediático» de los últimos días refuerza su disposición a encabezar la lista del PP a la Presidencia de la Comunidad.

Sin embargo, quien tiene que decidir sobre esa aspiración, Mariano Rajoy, guardó un prudencial y significativo silencio al ser cuestionado por el asunto en la comparecencia junto al presidente de Colombia, Juan Manuel Santos. Tampoco valoró las acusaciones de chantaje lanzadas por González y se remitió a la postura del Ministerio del Interior. Una postura que, al igual que la de Rajoy, es, de momento, de silencio, como demostró ayer el ministro del ramo, Jorge Fernández Díaz, al evitar hablar del tema. También el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, eludió hacer alusiones a las palabras del líder regional.