Después de superar no pocas prescripciones por parte de la Comisión de Patrimonio, al ser paso del Camino de Santiago, el proyecto del Ayuntamiento de Orbaneja Riopico para convertir un viejo almacén municipal de una sola planta en centro de recepción de peregrinos, está a punto de culminar y entrar en servicio.
Además, este proyecto inicial se ha completado con dos instalaciones más, el consultorio médico y un edifico de usos múltiples, gracia a la compra realizada por el Ayuntamiento de un solar contiguo, lo que ha permitido aglutinar en un inmueble tres usos distintos. Del conjunto constructivo solo se mantiene la pared original de piedra del almacén. El resto es de nueva construcción, incluida la planta superior del cobertizo, autorizada por Patrimonio que, eso sí, dejó claro que había que diferencias los distintos edificios.
Todo el complejo, que tiene una superficie de 270 metros cuadrados, está a falta de remates y en un mes estará ya a disposición de los vecinos así como de los peregrinos que a diario pasan por la localidad.
Aunque Orbaneja Riopico es una ruta alternativa dentro del Camino Francés, son más de 50.000 los peregrinos que atraviesan el pueblo al cabo del año, por lo que para ellos disponer de un lugar donde poder descansar unas horas en las mejores condiciones será todo un lujo. Las instalaciones para acoger a los peregrinos ocupan la totalidad de la planta que tenía el viejo almacén que también se utilizaba para organizar bailes antiguamente. Los espacios se han dividido en una amplia sala en la que se instalará una mesa, probablemente una bancada corrida que recorran las paredes, una ducha, baño separado y una zona de cocina con fregadero y microondas para que el peregrino pueda calentarse la comida. Tiene capacidad como para acoger a unos 15 ó 20 caminantes. El alcalde aclara que no es un albergue, por lo que no habrá camas. «Es un alto en el camino para descansar, darse una ducha y comer», añade Valentín Junco.
El consultorio ocupa parte de la planta baja de edificio levantado en el solar adquirido por la Corporación y cuenta con sala de espera, baño adaptado para minusválidos y una sala de consultas, suficiente para atender a los casi 300 vecinos de Orbaneja, incluida la pedanía de Quintanilla Riopico y la urbanización de las antiguas instalaciones militares.
En cuanto al edificio de usos múltiples, se compone de dos amplias salas para reuniones, conferencias, exposiciones y usos diversos que los vecinos demanden, un sala con conexión wifi y aseo. Está conectado con el centro de recepción, de tal manera que parte del mismo ocupa la planta que se ha permitido levantar, mientras que otra sala se sitúa encima del consultorio. Tiene, sin embargo, entrada individual por un lateral, y cuenta con ascensor para facilitar el acceso de las personas mayores o con movilidad reducida; en la planta baja también se ha ubicado la sala de calefacción y la tolva donde se quemará el pellet. Se ha optado por este sistema de calefacción porque, además de respetuoso con el medio ambiente, resulta bastante más barato. Tiene capacidad para 350 kilos de pellet y el jefe de obra cree que con una carga mensual será suficiente para calentar el local. En los meses más duros del invierno, dos cargas, como muchos.
El presupuesto del proyecto asciende a 230.000 euros, de los que el 60% del coste serán sufragado por el grupo de acción local Adecoar, que también ayudó a sufragar el arreglo de las campanas.