Los grupos de la oposición en el Ayuntamiento se han unido para presionar al PP a raíz de la quema de la sardina el martes de carnaval que acabó en una peligrosa explosión. Por suerte no hubo heridos pero el susto de los asistentes fue mayúsculo. Pocos días después, un informe de Bomberos dejó claro que el uso de gasolina para iniciar la combustión era «a todas luces, una manera inadecuada e irresponsable de realizarlo debido al riesgo que se genera para todas las personas allí presentes».Partiendo de esa base, los concejales de PSOE, Imagina y Ciudadanos que forman parte del Consejo Ejecutivo del Instituto Municipal de Cultura han solicitado una reunión para que el edil de Festejos pruebe si el acto «contaba o no con un Plan de Autoprotección para cumplir con las normativas exigidas».