La estación de tren pierde 25.600 viajeros desde su puesta en marcha

G. Arce / Burgos
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298.013 usuarios. En los recorridos de media distancia, los clientes han bajado un 0,7% este año, un 5,96% en larga distancia.

Los Alvia a Madrid son utilizados diariamente para viajes de negocios a la capital de España. - Foto: Luis López Araico

La estación ferroviaria ‘Rosa de Lima’ pierde viajeros desde su puesta en funcionamiento en 2008. La menor demanda del transporte por ferrocarril por la crisis económica, el escaso atractivo de algunos servicios que se ofertan desde la ciudad e incluso la ubicación de la propia terminal alejada del centro urbano, entre otras causas, han llevado a una pérdida de 25.687 viajeros en los últimos tres años, tanto en los servicios de media distancia, cuyos usuarios han descendido un 3,27%, como en los de larga distancia, que han bajado un 13,46% desde 2009.

Son datos extraídos de la respuesta que ha dado el Gobierno a una pregunta planteada por el senador socialista Ander Gil sobre el uso de la estación ferroviaria de Burgos desde su inauguración, el 14 de diciembre de 2008. De esa respuesta parlamentaria se desprende que la terminal ferroviaria de la avenida de los Príncipes de Asturias fue utilizada por 298.013 viajeros (subidos y bajados del tren) durante el pasado año, 9.360 menos que en 2010, un descenso que contrasta con el crecimiento del 3% experimentado por Renfe en 2011en el conjunto de España, año en el que transportó a un total de 468 millones de viajeros y en el que terminó la racha de cuatro ejercicios consecutivos con descensos de usuarios.

De los clientes locales de la ‘Rosa de Lima’, 169.844 cogieron el pasado año los 12 trenes diarios de media distancia disponibles y 128.169 los 22 trenes de larga distancia. Ambos servicios experimentan descensos continuados en su uso desde 2009, a tenor de los datos facilitados en el Senado.

Mejoras

Paradójicamente, en estos últimos tres años Renfe ha ido acometiendo constantes mejoras en los trenes que paran en Burgos, aprovechando, entre otras novedades, la entrada en funcionamiento de las líneas de alta velocidad entre Valladolid y Madrid y Zaragoza y Barcelona, que han recortado los tiempos de los desplazamientos por esas rutas.

La última mejora acometida entró en funcionamiento en la jornada de ayer, con los dos nuevos trenes Alvia en la ruta Madrid-Burgos-Vitoria, que cubren los viernes y los domingos y refuerzan el Alvia que entró en servicio de lunes a jueves el pasado mes de septiembre.

En el primer semestre de dicho servicio (septiembre 2011- febrero 2012) 30.000 viajeros han utilizado los tres Alvia diarios de ida y vuelta para viajar entre las estaciones burgalesas y Madrid, según los datos facilitados por Renfe. Burgos registró en este semestre 17.600 viajeros en la citada ruta, mientras que Miranda aportó 12.400. Estos datos reflejan un aumento del 35% en el número de viajeros que realizan este trayecto entre la ciudad de Burgos y Madrid respecto al mismo periodo del año pasado y un 25% en el caso de Miranda.

En cifras absolutas, el nuevo Alvia a Madrid ha supuesto la aportación de 7.000 viajeros en la provincia de Burgos, cifra que aumentará en próximos meses. Desde ayer, estos trenes realizan 40 servicios semanales en ambos sentidos, para los que Renfe oferta descuentos de hasta el 60% del precio del billete, precios especiales para viajes de empresa, a ferias o congresos. 

La ruta a la capital de España es la más utilizada en larga distancia, con 30.478 usuarios de Burgos el pasado año, muy por encima de la segunda, la que va a Barcelona (12.171), y las restantes:París (5.630) y Salamanca (5.549).

Por lo que respecta a la media distancia, el destino estrella es Valladolid, con 30.558 usuarios, seguido de Palencia (18.304) y Vitoria (5.585). A diferencia de la larga distancia, que se elige principalmente por motivos de ocio y turismo, los usuarios de los regionales utilizan estos trenes por motivos de trabajo.

Uniendo la media y larga distancia, la terminal ‘Rosa de Lima’ gestiona al año más de 12.400 trenes de viajeros.

Descensos

El sentir entre los usuarios locales y entre los propios trabajadores de la estación es que la utilización del tren en Burgos dependerá de las rutas que oferte, de los tiempos y, especialmente en estos momentos, de la política de precios.  

«Los servicios ferroviarios en Burgos resultan, en general, poco atractivos. De entrada, prácticamente todos son de paso y los horarios son a conveniencia del origen/destino de cada tren y como la ciudad está en medio, los trenes pasan cuando les toca pasar, no cuando convendría a los viajeros», opina José Ramón, un usuario habitual de la estación y experto en temas ferroviarios, quien añade  que, pese a las mejoras introducidas, «entre Burgos y Madrid hay pocos trenes y caros frente a las muchas más frecuencias del autobús a mucho mejor precio».

Añade más argumentos: con algunas ciudades que rodean Burgos «o no tenemos tren o el que hay no es competitivo y por tanto no se usa». En el caso de las vecinas Valladolid, Palencia y Vitoria, apunta, el atractivo de los servicios se ha resentido con la ubicación de la estación en la ciudad. «pues son los que más viajeros han perdido», opina.

«Otro factor disuasorio para el uso del ferrocarril en Burgos -añade este usuario- es la política de precios de Renfe. Como decía antes muchos de los trenes son pasantes -casi todos- y en larga distancia la política de precios es castigar los recorridos parciales. Eso afecta mucho a las relaciones con Burgos».

A este respecto, pone como ejemplo de las dificultades de comunicación con Burgos el hecho de que se haya dejado perder la línea directa con Aranda.

Fuentes sindicales ferroviarias de la UGT no descartan que la salida del centro de la ciudad de la estación haya tenido su incidencia en la bajada de viajeros, aunque la relativizan dado el momento difícil que se vive en el sector del transporte por la caída de la demanda.  «Es cierto que Renfe ha acometido transformaciones puntuales en los servicios y que mientras los Alvia están ganando viajeros hay trenes nocturnos que han dejado de funcionar», señalan desde la UGT. De hecho, ahora solo permanecen los servicios de Trenhotel a Barcelona, París (muy utilizado en los viajes familiares a Disneyland París) y a Lisboa.