El fabricante de fresadoras industriales Nicolás Correa ha firmado la escritura pública de compraventa de la planta de Icíar (Guipúzcoa) por un importe total de cinco millones de euros, según ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

De estos cinco millones de euros, cuatro han quedado aplazados, debiendo satisfacerse antes del 30 de junio de 2019, aunque la operación está sometida a una condición suspensiva, condicionada al cobro integro de la venta, que anula cualquier riesgo por impago.

La compañía anunció en enero de 2017 el cierre de esta planta en el País Vasco para concentrar la producción en su fábrica de Burgos ante el estancamiento de la facturación de la compañía.

En una nota al regulador, Nicolás Correa dijo que desde el ejercicio 2014 su facturación se estancó en 44 millones de euros, una cifra que no justificaba mantener las dos plantas abiertas, puesto que en la factoría de Burgos existe capacidad física necesaria para absorberlo por completo.

Dicha operación no supondrá un beneficio significativo en la cuenta de resultados, puesto que se ha hecho a un precio muy cercano al valor contable que actualmente figura en los libros de la compañía.