El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Ribera del Duero da «prácticamente» por concluida la campaña de vendimia de este año a falta de que entre en las bodegas «una cantidad simbólica de uva». La cosecha, por tanto, llega a su fin dentro de este territorio vinícola protegido con buenas noticias por partida doble, como explica el presidente de este consejo, Enrique Pascual: «Hemos tenido una cosecha importante en cantidad, pero lo destacable es que este año también podemos decir que es de gran calidad».
Según los datos publicados por la propia DO, las instalaciones adheridas a la misma han recepcionado ya 124.717.752 kilos, cantidad que la convierte, tal y como señala Pascual, en la segunda mejor de la historia respecto a uva recolectada, únicamente detrás de la de 2016, en la que se batió el récord hasta la fecha, 133.112.138 kilos. De esta forma, la cosecha de 2018 desbanca de esa segunda posición a la de 2014, en la que se recogieron 122.324.673.
Como asegura Enrique Pascual, el resultado de esta vendimia no es solo destacable por el alto rendimiento de las viñas en cantidad, sino por las condiciones que han aportado al fruto. «La uva es de una calidad excepcional, muy buena. Los productores están muy contentos con lo que han recogido del campo», afirma el presidente del consejo regulador.
Estos resultados que arroja la última vendimia se traducen, según Pascual, en vinos con intenso color y con mucha estructura. «Francamente van a salir unos grandes vinos del 2018. Podemos decir que han sido buenas la cosecha y las uvas y que también lo será el vino», adelanta Pascual, que asegura que ahora pueden hacer un balance positivo del año, que comenzaron con cierto pesimismo teniendo en cuenta los datos que dejó la cosecha del año pasado, la peor de la historia. «Nos fuimos alegrando poco a poco, cuando empezamos a ver lo que podía venir, que se preveía bueno, como ha sido».
más kilos permitidos. Además de unas condiciones climatológicas favorables, y de un suelo con abundante agua, lo que ha propiciado que las bayas que conforman los racimos sean de un mayor tamaño, también ha favorecido esa gran cantidad de uva recogida el hecho de que este año el Consejo haya permitido recoger un 10% más de kilos por hectárea, lo que se traduce en 7.700 en vez de en 7.000. Además, también hay que tener en cuenta que este año la DO cuenta con 500 hectáreas más de viñedo que años anteriores, lo que hace un total de 23.000.
Aunque no se puede dar por terminada al cien por cien la actual vendimia, según señala Enrique Pascual, si se puede hacer de forma práctica porque queda una parte muy residual de uva por recoger. «Luego hay que cuadrar todo y hacer las revisiones, pero podemos estar satisfechos con esta campaña», que arrancó en algunas instalaciones el 17 de septiembre y que se ha desarrollado de manera normal desde entonces, siendo los picos más altos de recogida de la uva durante el puente del Pilar.
De hecho, según los datos que ofrecen desde esta Denominación de Origen, el día que más kilos de uvas llegaron a las instalaciones de la comarca fue el 13 de octubre, en el que casi se llega a los once millones. El día 12 fue el segundo más importante en volumen, ya que también se superaron los diez millones de kilos de uva recolectados, y el 10 de octubre, con nueve millones, ha sido la tercera jornada más importante esta campaña.