Bienvenidos al mundo de los vehículos clásicos

Belén Antón
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El taller M&M Clásicos, que José Vicente Díez tiene en Quintanar de la Sierra, será el protagonista del programa 'House of cars' que emitirá la cadena Discovery Max

José Vicente rodeado de coches en su taller, escenario principal del programa ‘House of Cars’ - Foto: Azúa

Hay personas que se pasan media vida imaginando como sería ésta si hubieran perseguido su sueño y hay quienes deciden dejarlo todo y guiarse por su pasión. José Vicente Díez Monforte pertenece a este segundo grupo. Gran aficionado al mundo de los coches clásicos, decidió dejar su trabajo como ejecutivo en una multinacional y apostar por lo que realmente le hacía feliz. Así llegó a Quintanar de la Sierra, pueblo de su mujer, hace más de quince años, durante los que con esfuerzo y mucho trabajo ha conseguido situar a su taller M&M Clásicos en una posición de liderazgo dentro de la venta y restauración de este tipo de vehículos. Ahora, gracias al programa de televisión ‘House of cars’, que se está rodando en su taller y su casa, los telespectadores podrán ser testigos de su día a día y del emocionante mundo de los coches clásicos y de colección.

«Es un acontecimiento que Discovery se haya fijado en una empresa y en un aficionado español y me enorgullece. Siempre me he quejado de que es difícil ser profeta en tu propia tierra», confiesa José Vicente. «Comenzamos el rodaje a primeros del mes de mayo y ya estamos ultimando lo que será la primera temporada. En ella sale nuestro día a día, cómo trabajamos en el taller, la transformación de varios coches de distintas épocas y estilos, reuniones con clientes, entregas de vehículos y también momentos de ocio. Burgos, Quintanar y toda la comarca serán coprotagonistas, aparecerán mis amigos, calles del pueblo, el día del Parral en Burgos, el castillo o cómo mi familia buscaba mi regalo de cumpleaños en la capital», explica el protagonista.

Cuando Discovery Max propuso a José Vicente grabar un programa de televisión sobre su taller, enseguida dijo que sí. «Siempre que se tratara con respeto, de manera seria y profesional, estaba de acuerdo. Es una oportunidad, no solo para mí, también para la zona. Para mostrar nuestra pasión por los coches clásicos. Somos personas normales y queremos transmitir esa cercanía. El programa va a ser muy familiar, pretendemos hacer algo diferente, darle nuestra personalidad y hacer ver que en España hay mucha afición ya madura y que hay buenos profesionales que saben hacer las cosas muy bien», afirma el dueño de M&M Clásicos, que lleva perfilando el programa tanto con la cadena como con El Terrat, productora que se encarga de su elaboración, desde octubre del año pasado.

Durante estas últimas semanas, un equipo formado por varios profesionales de la productora se ha desplazado hasta Quintanar para poder grabar el programa, que en principio comenzará a emitirse por capítulos en octubre en España y después en otros países de Europa y de habla hispana. «Se está llevando a cabo con equipos profesionales extraordinarios y en altísima calidad, con una cuidada imagen y en formato cine. El trabajo de posproducción también será importante», afirma José Vicente Díez, que confiesa que si el programa gusta comenzarán a preparar la segunda temporada. La grabación de la primera se está realizando en intensas jornadas. «No hacemos ningún tipo de alarde, lo tratamos con normalidad. Al principio, cuando no estás acostumbrado a las cámaras, es un poco complicado, pero enseguida te habitúas. Además, no tenemos ningún guión preparado. Saldrá lo que somos», cuenta José Vicente, que afirma que los directivos de la cadena fuera de España alucinaron cuando descubrieron donde estaba emplazado el taller, en el polígono de Quintanar, donde vive con su mujer y sus dos hijos, Alvar,9 años, y Nuño, de 8, ya grandes fanáticos de los coches con su propio club dentro del taller.

Referente

Cuando José Vicente llegó a la localidad serrana ni siquiera existía el polígono donde hoy se encuentran sus dos naves -tiene una más en la capital burgalesa-. «Yo construí la primera de nuestras naves. Esto era un descampado y me lancé sin referencia, en un oficio incipiente en España en el que consideraba el sitio ideal para este trabajo». Entonces comenzó a viajar fuera en busca de ideas que le sirvieran de apoyo y vio internet como la apuesta de futuro para una comercialización global, que por entonces no estaba tan desarrollada. «Pensé que podía llevar a cabo mi trabajo en cualquier lugar del mundo. Yo quería vivir ilusionado y dedicarme a mi pasión».

Enseguida comenzaron a llegar los primeros coches antiguos a su taller, la mayoría de ellos clásicos americanos, donde con manos de orfebre joyero, José Vicente y sus mecánicos artesanos cuidan con mimo y cariño cada detalle en su reparación y restauración integral, dando como resultado no solo impresionantes coches clásicos, sino verdaderas joyas de la historia de la automoción, algunas de ellas ejemplares de ediciones muy limitadas. «Al principio trabajábamos con coches muy antiguos, ahora nos centramos en los años comprendidos entre la década de los cuarenta y de los setenta. Contamos con Cadillac, Chevrolet, Dodge, Mustang, Corvette, Lincoln, Buick... y de otras marcas no americanas, como Rolls Royce, Jaguar, Citroën, Ferrari, Porsche, Mercedes, entre otras. En total tenemos más de ochenta en stock de forma permanente», comenta. Dispone además de una oficina en Nueva York para poder gestionar la compra de vehículos en Estados Unidos y su llegada hasta España.

En estos momentos, la empresa de José Vicente Díez se encuentra en una posición de liderazgo dentro de este sector y goza de la confianza de sus clientes, la mayoría de ellos de países europeos como Francia, Portugal, Suiza o rusos afincados en España. «Hay quien lleva tiempo ahorrando y compra un coche clásico, otros, los que menos, lo hacen por modas, y la mayoría, por inversión. Es un sector en el que se incrementa el valor de las piezas buenas, este tipo de coches se revaloriza por encima de otros bienes”, confiesa el empresario, que no revela el nombre de algunos de sus importantes clientes.