La Consejería de Agricultura y Ganadería pondrá en marcha el próximo curso escolar un Erasmus agrario nacional e internacional que permita a los jóvenes que se encuentran en los últimos cursos, aquellos que estén en proceso de incorporación o se hayan incorporado recientemente al sector mejorar los resultados de las explotaciones. El objetivo es que puedan conocer cómo se trabaja en otras comunidades e incluso en otros países y tengan acceso a otros modelos de negocio con los que se compite y que están alcanzando “mejores resultados”.
Así lo anunció la responsable de este departamento, Milagros Marcos, durante su participación en ‘Los Desayunos de Ical’, donde precisó que Castilla y León también se ha ofrecido para acoger a jóvenes de otros territorios y darles a conocer las “explotaciones competitivas y bien dimensionadas” con las que cuenta la Comunidad.
Con el objetivo de que se ponga en marcha el próximo curso académico, las pretensiones de la Junta pasan por financiar este programa con una dotación presupuestaria aún por determinar pero suficiente para cubrir los gastos de los participantes en materia de desplazamiento y también de estancia. Mientras tanto, se trabaja en la definición del periodo “más interesante” para su desarrollo y en la actividad que llevarán a cabo los estudiantes de este programa en los países receptores.
En relación a los sectores más interesantes para esta iniciativa, Marcos aclaró que se están estudiando algunos como el del vino, de gran importancia para Castilla y León, aunque también otros de relevancia como los lácteos o el ovino, que con las mejoras en las explotaciones dentro de la red de granjas tiene “datos que pueden avanzar en la competitividad”, dijo.
A juicio de la consejera, Castilla y León tiene “margen de mejora” y está haciendo “las cosas bien”, por lo que estimó que la Comunidad “puede aportar” a este programa y a los estudiantes que viajen hasta este territorio. “Nos interesa que nuestros jóvenes vean cómo se puede hacer, siempre hay de quién aprender y seguir mejorando en todos los sectores, no solo en el primario, y aprovechar lo que hasta ahora no se había planteado”, añadió.
Con la puesta en marcha del Erasmus agrario, la Junta quiere seguir trabajando en dar una mayor formación a los profesionales y atender a las necesidades del sector y a los cambios que ha experimentado en los últimos años. A juicio de Milagros Marcos, el sistema formativo y de investigación en la Comunidad “ha cambiado totalmente” para adaptarse a las nuevas necesidades y a las características de las personas.
Además, el respaldo de los profesionales del sector a estas actuaciones formativas está teniendo un gran respaldo. La consejera puso de relieve el crecimiento de las personas que están recibiendo formación detallada en aspectos “de lo más variopinto”, que han pasado de las 2.300 en el año 2015 a las 13.200 de la actualidad, lo que supone un incremento de 11.000 personas en apenas cuatro cursos escolares. “No se estaba aprovechando convenientemente la formación para el empleo” para favorecer la integración laboral en el sector agroalimentario, estimó.
Marcos recordó que desde el Ejecutivo autonómico se ofrece una “formación puntual” financiada directamente por la Junta “de forma autónoma” y con cursos “a la carta” para aquellas personas que puedan necesitar una formación concreta para integrar un sector primario “cada vez más competitivo y atractivo”. Para llegar a este punto, se hizo un análisis de la formación en la Comunidad, estudiando las posibilidades y las necesidades “que no estaban cubiertas”.
Los centros de FP se convirtieron en centros integrados para así “dar respuesta al futuro” y adecuarse a las demandas del sector. Marcos reconoció tener una “especial esperanza” en esta nueva formación, que consideró que es un aspecto diferenciador que permite dar “el salto” en un sector y así “ganar negocio” y “hacerlo más atractivo” ya que “hay muchísima demanda”.
Aunque consideró que el sector resulta “cada vez más atractivo”, Marcos lamentó que aún tenga mucha vinculación a la financiación europea, por lo que hizo un llamamiento para “cambiar la imagen” de un colectivo que cada día cuenta con personas más formadas, con incorporaciones de personas que cuentan con carreras superiores y que asisten a los centros de FP de la Junta para desarrollar la parte práctica.