El Mirandés es uno de los equipos más en forma de Segunda y el rival al que todos quieren evitar en estos momentos. El salto que han dado los rojillos en la clasificación, además de reforzar anímicamente al vestuario, ha provocado que el resto de equipos miren con recelo a los de Carlos Terrazas. «Se nota que ahora los rivales nos tienen más respeto», asegura Gorka Kijera.

Para el lateral, la tabla influye en ocasiones de forma inconsciente en la mentalidad de los equipos a la hora de preparar el partido durante la semana. «Cuando estás en la zona baja el rival afronta los encuentros de otra forma; ahora se han dado cuenta de que somos un conjunto peligroso».

Saber gestionar el nuevo rol será determinante para mantener la línea ascendente. «Saber que el contrario toma más precauciones cuando juega contra ti es positivo porque te da confianza, aunque también es más difícil sorprenderle», apunta Kijera, quien tiene claro que «si somos capaces de mantener el nivel actual, sentirse protagonista siempre juega a favor».

Los 24 puntos que figuran en el casillero rojillo han despejado el horizonte después de un comienzo irregular, pero la plantilla quiere huir del conformismo. «Tenemos la posibilidad de irnos de vacaciones con más de la mitad de puntos necesarios para la salvación en el bolsillo y no la queremos desaprovecharla. Si ganamos este partido podemos acabar la primera vuelta con unos números importantes», asegura el lateral.

La aportación de los jugadores con más experiencia y jerarquia dentro del vestuario es clave para frenar la euforia tras cuatro triunfos consecutivos. Si en los malos momentos son los veteranos quienes asumen galones y tiran del carro, ahora también recae sobre ellos la responsabilidad de que  el equipo mantenga los pies en el suelo. «Dependemos de nostros mismos porque si nos convencemos de que podemos pelear por cosas bonitas y trabajamos fuerte para ello, estoy seguro de que no vamos a sufrir esta temporada. Sin embargo, si creemos que ya está todo hecho y nos conformamos con aspirar a la permanencia cometeremos un grave error», asegura Kijera.

 Aunque los últimos resultados han otorgado «tranquilidad» a la hora de trabajar, el lateral destaca la ambición de una plantilla que aún está lejos de tocar su techo futbolístico. «El éxito está en mantenernos unidos y en darlo todo en cada encuentro para podernos sentir orgullosos. Es la única forma de seguir sumando y creciendo», apunta.