El padre y el hermano del niño fallecido en Añastro están fuera de peligro

R.L. / Miranda de Ebro
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Carlos Salinas, conductor del otro vehículo y que también murió, era conocido en Vitoria por su vinculación al baloncesto

El menor fallecido viajaba con su padre y su hermano en el vehículo blanco. El impacto frontal fue muy violento. - Foto: Truchuelo

El brutal choque frontal que sufrieron en la tarde del pasado martes dos vehículos en la carretera CL-127, a la altura de Añastro, se llevó la vida de dos personas. De inmediato falleció Mikel Urrutia, de cinco años, uno de los dos menores que viajaba con su padre, mientras que unas horas después también perecía en el hospital Santiago, en Vitoria, el conductor del otro vehículo, un alavés de 56 años, Carlos Salinas.

En el hospital Txagorritxu continúan en proceso de recuperación tanto el padre del niño fallecido, Jon Urrutia, de 39 años, como el hermano mayor del pequeño, Íñigo, de 8. Los dos evolucionan de manera favorable y han pasado a planta.

El cuerpo del menor fallecido fue trasladado tras el accidente al  Instituto Anatómico Forense de Burgos para realizar la correspondiente autopsia, que determinará la causa exacta del fallecimiento. El niño, al igual que su hermano, viajaba en la parte trasera del coche de su padre y ambos iban correctamente sentados en las sillas reglamentarias. Sin embargo, el golpe fue tan violento que la silla de Mikel se desplazó hacia adelante, ejerciendo una presión mortal contra su pecho. Mañana, el cuerpo será incinerado en Vitoria y por la tarde, a las 19.30 horas, se oficiará el funeral en la iglesia de La Puebla de Arganzón, localidad en la que reside su familia y donde la noticia cayó como un jarro de agua fría, tanto por lo dramático del suceso como por la implicación de la familia en la vida de la villa. Tanto la madre del niño, Blanca Renedo, como su abuelo, Vicente Renedo, son muy conocidos por su participación en las actividades de la localidad. El Ayuntamiento decretó ayer dos días de luto oficial que concluyen hoy a la media noche.

Además del pequeño de cinco años, también pereció en el accidente el conductor del otro vehículo. Se trata del vitoriano Carlos Salinas, de 56 años, conocido en la capital alavesa por su vinculación con el baloncesto. Jugó en el principal equipo de la capital, el Baskonia, durante cuatro temporadas no consecutivas durante la década de los 70 y 80. Fue en la temporada 74-75 cuando dio el salto al primer equipo, al que estuvo ligado hasta la temporada 80-81. También jugó en el Helios Zaragoza y en el Breogan de Lugo.

Ayer, tanto la ACB como el Baskonia emitieron sendos comunicados lamentando el fallecimiento de Salinas, que en los últimos años estuvo vinculado a la actualidad baskonista como comentarista en varios medios de comunicación. El funeral en su memoria también tendrá lugar mañana a las 19.30 horas, pero en la parroquia de la Coronación de Nuestra Señora, en Vitoria.