Asaja-Burgos reivindica una "uniformidad coherente" en los precios del lechazo durante todo el año

M.L. Martínez (ICAL)
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La localidad de Fresno de Río Tirón acoge la XVI Fiesta del cordero y lechazo de Burgos, organizada por el sindicato agrario

El presidente de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) de Burgos, Santiago Carretón, reivindicó hoy en la localidad de Fresno de Río Tirón una “uniformidad coherente” en los precios del lechazo de Castilla y León a lo largo de todo el año.

Carretón señaló que se trata del principal problema que afecta en la actualidad a los ganaderos de ovino, si bien reconoció que “este año ha sido en el que menos diferenciación ha habido en los precios” aunque “sí que han estado bajos después de Navidad, pero no con las diferencias de otros años”.

En este sentido, Carretón indicó que “algún año se ha pasado de 80 a 35 euros por lechazo” dependiendo de la época del año y se mostró partidario de que pudiera existir un precio medio que se mantuviera a lo largo del año, que podría oscilar en torno a los “70 u 80 euros por lechazo”.

El municipio de Fresno de Río Tirón acogió hoy la XVI Fiesta reivindicativa del cordero y lechazo de Burgos, organizada por Asaja-Burgos, a la que asistieron cientos de personas. El objetivo es poner de manifiesto los problemas que siguen afectando a los ganaderos de ovino.

Entre ellos, Carretón citó “los bajos precios de la carne y de la leche, el envejecimiento del sector para el que no hay relevo generacional por la falta de rentabilidad de las explotaciones, la falta de mano de obra cualificada que exige la presencia diaria del ganadero en la explotación y el laberinto burocrático en que la Administración ha sumergido a los ganaderos, que hace que el sector no remonte la crisis estructural que padece”.

Todo lo anterior, agregó, “se acentúa con el continuo fraude que sufren los consumidores al comprar cordero y lechazo de Burgos” ya que, según denunció “en realidad el producto proviene de otros países y se identifica como de Burgos por el simple hecho de haber sido sacrificado en los mataderos burgaleses”.

Por ello, subrayó que el lechazo de Burgos es alimentado “única y exclusivamente con leche materna” y además es “de raza autóctona y sus cruces”, mientras que “el cordero de fuera es alimentado también con piensos”, precisó y agregó que “este año se ha empezado a conseguir que venga marcado” pero abogó por “seguir mejorando en este sentido”.  

Con esta jornada, Asaja-Burgos pretende poner de manifiesto “la verdadera situación del sector”, para que el mismo sea apoyado desde las diferentes administraciones públicas. Un concurso gastronómico con más de 40 recetas diferentes de cordero y una caldereta popular fueron los ingredientes de la XVI Fiesta reivindicativa del cordero y lechazo de Burgos.