La Junta dice sí a las peticiones de San Juan de Dios y evita el cierre

Angélica González / Burgos
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Se establecerá un pago por proceso y en febrero se licitará la atención a pacientes crónicos y de cuidados paliativos. La orden retirará la denuncia del concierto y se compromete a mantener el empleo si resulta adjudicataria

Un nutrido grupo de burgaleses se concentraron en la Plaza Mayor para apoyar a la plantilla, al hospital y para escuchar los acuerdos adoptados. - Foto: Ángel Ayala

La Junta de Castilla y León y San Juan de Dios celebraron ayer haber llegado a un acuerdo que permitirá que el hospital del Paseo de la Isla siga abierto. En una reunión encabezada por el presidente del Gobierno regional, Juan Vicente Herrera, y a la que asistieron el provincial de la Orden, Miguel Ángel Varona, junto con José María Bermejo, otro miembro de la misma; el consejero de Sanidad, Antonio Sáez, y el delegado de la Junta, Baudilio Fernández-Mardomingo, se acordó establecer un nuevo procedimiento de concertación mediante el pago por proceso y no por paciente y día como está ocurriendo ahora. Esta condición se incluirá en el concurso público que se licitará en febrero para gestionar la atención a pacientes de media y larga estancia y precisados de cuidados paliativos.

Ambas condiciones, que ahora se llevarán a cabo, habían sido propuestas por la institución religiosa y sin ánimo de lucro  prácticamente desde el principio de las negociaciones y el consejero de Sanidad ya las había asumido en el encuentro del pasado 27 de noviembre aunque en aquel momento dijo que se llevarían a cabo «a largo plazo», matiz importante que ha cambiado ahora al concretarlo en el mes de febrero, al que añadió el de la reducción del número de camas concertadas de las actuales 140 a 50. Mientras se produce el concurso y la adjudicación que resulte del mismo,  la Junta «provisionalmente»  mantendrá los niveles de financiación para la atención a los pacientes crónicos. Ayer  San Juan de Dios contaba con 68 procedentes de Sacyl, doce menos de los que tenía cuando empezó la crisis.

Por su parte, la orden religiosa se ha comprometido a retirar la denuncia del actual concierto que le une a la Junta -que fue presentada el pasado mes de septiembre-, a mantener el funcionamiento del hospital, a presentarse al concurso público y «en el caso de resultar adjudicataria», se dice textualmente en el comunicado de la Junta, «a mantener el empleo actualmente existente». También se señala en estos acuerdos «permiten superar el conflicto existente y garantizar la viabilidad del hospital considerando que es preciso mantener su actividad como complemento al Hospital Universitario de Burgos, en particular en relación con los cuidados paliativos y la atención a enfermos  crónicos».

La Junta quiso enviar «un mensaje de tranquilidad» a los pacientes así como a sus familias y al conjunto de la sociedad burgalesa». A los trabajadores les animaron «a que continúen desarrollando su labor tan reconocida en Burgos».

Desde la institución confesional, un  portavoz se limitó a expresar que está «contenta por el acuerdo, sobre todo por los pacientes, por los trabajadores y por la sociedad burgalesa en su conjunto».