Los resultados, a pesar de ganar las elecciones, no han sido buenos, su partido pierde 28.000 votos, los grandes municipios y cuatro diputados. ¿Se ha planteado dimitir?

De momento no. Creo que la responsabilidad está en gestionar los buenos momentos, pero sobre todo los de mayor complicación. Es verdad que hemos ganado en muchos municipios y que en otros no nos dan la mayoría suficiente, y hemos ganado la Diputación, aunque hemos perdido cuatro diputados, pero desde la perspectiva de presidente provincial esta situación hay que gestionarla. Ahora hay que dar un paso valiente. En su momento los afiliados me dieron su confianza no solo para gestionar los momentos dulces sino también para que esté cuando llegan estos en los que hay que tener la cabeza fría. El último que abandona el barco es el capitán y el PP de Burgos está por la labor de trabajar por sus vecinos... y estaré hasta cuando me digan los afiliados que me tengo que marchar.

Algunos de esos afiliados ya han comenzado a pedir responsabilidades...

Tanto el secretario provincial como yo hemos asumido la pérdida de votos en una coyuntura global que posiblemente nos ha pasado factura. Aquí estamos para gestionar lo fácil y lo difícil. En el 99 nos tocó gestionar una victoria municipal con diez concejales, no pudimos gobernar por un pacto anti-PP y tuvimos que gestionar desde la oposición lo que el partido nos exigía en esos momentos. Ahora, salvo que se produzcan circunstancias extraordinarias, hay que dar la cara. Lo fácil es cuando se gana, pero hay que gestionar también cuando el vecino no te da una confianza total. Pero insisto hemos ganado las elecciones y flagelaciones las justas porque la desgracia del PP en estos momentos es que tenemos que sacar mayorías absolutas, otros se darían con un canto en los dientes sacando los resultados obtenidos por el PP, ganando en 217 ayuntamientos con mayoría absoluta y 17 con mayoría relativa.  

¿No ha falta autocrítica?

La primera auto crítica que hemos hecho es por nosotros porque tal vez no hemos sabido comunicar a los vecinos el esfuerzo realizado en un momento complicado económicamente y en el que se ha hecho todo lo que se ha podido e incluso más, pero sí que es verdad que posiblemente la coyuntura nacional nos ha pasado factura... la corrupción, los ajustes, etc. Pero así como en el 99 fuimos una isla no ganando el Ayuntamiento de Burgos ahora no somos una isla y no hemos sido de los peores, solo hay que mirar los resultados de todas las capitales de provincia de la región, aunque esto no sea ningún consuelo. Creo que se ha votado más en clave nacional que en una política local y hay municipios en los que resulta inexplicable como se ha producido ese desencuentro con los votantes.

El que sí se ha mirado al espejo ha sido Juan Vicente Herrera, que se plantea no optar a un nuevo mandato ¿que opinión le merece esta reflexión?

Herrera es el presidente que mejor ha salido de las urnas, está a uno de la mayoría absoluta, y puedo existir cierto desencanto, pero ahí estamos para gestionarlo. Herrera es el mejor valor que tiene el PP, antes y en estos momentos, en Castilla y León.

Herrera ha convocado mañana (hoy para el lector) a todos los presidentes provinciales. ¿Espera alguna sorpresa?

Espero que no. Normalmente, cuando hay elecciones, el presidente nos reúne a los presidentes provinciales para hacer un balance de lo que ha pasado en cada provincia y hacer auto crítica,  ver en lo que hemos fallado y en qué se puede mejorar. Espero que en esta ocasión vaya por esa misma línea de los últimos encuentros tras las elecciones.

¿Cómo valora el ‘recadito’ enviado por Herrera al presidente del Gobierno pidiéndole que se mire al espejo antes de decidir si es candidato en las generales?

En estos momentos es complicado, pero coincido con el presidente regional en que alguna ficha es posible que haya que tocar, no sé en qué sentido. La globalidad  posiblemente la tenga el presidente nacional de lo que ha pasado en toda España, la nuestra es una perspectiva más local.

Pero parece necesario un cambio de rumbo...

Vamos a ver si hay algún cambio de tendencia o de política  porque la situación económica va mejorando y el presidente del Gobierno va a tener margen de maniobra y si esa mejora se traslada a los hogares, a las familias y a las personas que están en ese desencuentro con el empleo, estos es lo que todos esperamos.

La irrupción de caras nuevas en el escenario político,  ¿no les obliga a hacer una renovación?

Si, pero se tiene que hacer de forma tranquila y normal. Es verdad que, y me incluyo, hay personas que llevamos muchos años en política, pero hay que valorar los momentos y precisamente en este, y hablo desde el ámbito personal, no hay que huir. Posiblemente hace cuatro años hubiera sido mucho mejor irme con supermayorías absolutas, pero considero que hay que dar la cara cuando las cosas van mal. No he pensado en la dimitir. Entiendo a los compañeros que han lo han hecho, pero creo que hay que aguantar el tirón.

¿Qué lectura hace de los resultados de Burgos capital? ¿En qué han fallado?

No sé lo que ha fallado porque creo que el alcalde, Javier Lacalle, ha hecho un trabajo extraordinario, de presencia, contacto directo con muchísimos colectivos y de trabajo directo con las personas que lo estaban pasando mal. Lacalle ha sabido gestionar este Ayuntamiento muy bien en un contexto muy complicado y con unos recursos muy limitados, pero que dejan esta ciudad en unas condiciones económicas magníficas para afrontar el futuro. Habrá que analizar qué hemos podido hacer mal para que las personas no hayan confiado en el PP.

¿Ve viable un pacto de gobierno o acuerdos puntuales?

Creo que se pueden abrir las dos vías. Un acuerdo de legislatura con las formaciones  que son más cercanas al PP, Ciudadanos, o bien que se permita que la lista más votada asuma la responsabilidad de gobierno, es decir el PP, lo que nos obliga a buscar el acercamiento a otros grupos para que Burgos siga progresando. No podemos permitirnos el lujo de estancarnos cuatro años.

¿Teme un todos contra el PP?

Creo que sería malo para Burgos un acuerdo antinatural, lo vimos en el 99. Hay que recordar al PSOE que gobernó el Ayuntamiento de Burgos con menos concejales de los que tiene en estos momentos el PP. Un pacto anti-PP determinó que el señor Olivares gobernara con menos concejales  de los que tiene hoy el PP. Esto es un toque de atención al señor De la Rosa que ha dicho que el PP no puede gobernar con diez concejales, alguien que evoca la memoria del 99 debe evoque toda la memoria y no quedarse en lo superficial.

Donde sí parece posible el acuerdo es en Aranda...

Se da la misma circunstancia que en Burgos y el PP tiene que tener la responsabilidad de intentar formar el gobierno también desde ese consenso que los vecinos nos han pedido.

¿Tiene sentido que Imagina Burgos, formación sin implantación provincial,  tenga tres  diputados provinciales?

Posiblemente no tenga mucho sentido pero es así la Ley, en este caso en detrimento de Ciudadanos, que tiene muchos más concejales en la provincia. Va a ser muy difícil justificar esa presencia en la Diputación cuando no tienen nada que defender y aportar a ayuntamientos de menos de veinte mil habitantes.

En Miranda la apuesta, su apuesta, era Borja Suárez y no ha fructificado...

No me arrepiento de haber tomado esa decisión y haber apoyado a Borja Suárez porque me parece un magnífico político, que sabe tomar decisiones y consensuar con otras formaciones. Creo que Miranda se pierde la oportunidad de haber tenido un gran alcalde, pero los ciudadanos han decidido que gobierne el PSOE y seguiremos haciendo una oposición constructiva.

Se pierde alcalde y se gana un portavoz en la Diputación ¿no?

Todavía no estamos hablando de diputados provinciales, pero es verdad que estoy muy satisfecho con el trabajo que ha hecho estos últimos cuatro años al frente de la portavocía del PP.

El batacazo ha sido importante en Las Merindades y La Bureba, dos zonas históricamente del PP  ¿que ha ocurrido para que no gobiernen en los municipios más importantes?

¿Quién nos ha ganado?, en muchos sitios agrupaciones independientes, en otros el PSOE como en Espinosa , pero es verdad que tanto en Villarcayo como en Medina hemos ganado las elecciones y nos tendrían que dar la oportunidad de formar gobierno con pactos de progreso. Cuando se habla de resultados del PP el único posible es el de mayoría absoluta, cuando en otros sitios cualquier mayoría relativa se valora mucho más que en Burgos.

¿Su pecado ha sido no escuchar a los vecinos? ¿No se definieron tarde sobre el fracking?

Nos definimos en el momento oportuno cuando se publicaron los primeros informes de impacto ambiental, entonces todos los ayuntamientos y la Diputación firmamos alegaciones contra ellos. Lo hicimos cuando tocaba, sin demagogia.

¿Tiene respuesta para lo ocurrido en Briviesca?

José María Ortiz ha sido un buen alcalde y ha peleado por los intereses de la ciudad en todas las administraciones. Tenía un objetivo muy claro de restaurar el patrimonio histórico y ahora ya veremos si la confluencia de estas formaciones políticas pueden obtener los resultados que el PP tenía trazados para la ciudad.

Otras plazas que se han perdido son Roa, Pradoluengo, Melgar, Lerma, etc...

Ha habido un voto contra el PP porque en muchas de esas plazas hemos tropezado con todos, con partidos estabilizados, con independientes y otras formaciones. Me llaman la atención los casos de Roa y Pradoluengo donde se ha hecho un importante esfuerzo inversor. Esto me lleva a pensar que los vecinos han votado en clave nacional porque si hubieran valorado el trabajo de nuestros alcaldes el resultado hubiera sido otro.

¿No está alejados algunos alcaldes de los vecinos y en especial de los jóvenes?

Hay de todo, hay personas que llevan muchos años al frente de ayuntamientos y otros que llevan poco, como Raquel Contreras (Pradoluengo) o Raquel González (Aranda) y ambas han tomado decisiones muy valientes para solucionar problemas y no sé si eso se ha puesto encima de la mesa de los votantes. Nuestros alcaldes han estado en la calle para solucionar los problemas.

Hoy se reúne con los presidentes comarcales del partido ¿cuál va a ser su mensaje?

El mensaje es muy claro, asumir la responsabilidad que nos dan donde gobernamos y la de oposición donde así lo quieren los vecinos, pero que ya entramos en campaña electoral (municipal) para recuperar a los vecinos que nos han dado la espalda.