Una orden de la Consejería de Presidencia de la Junta de Castilla y León firmada el pasado día 20, y aprobada en el Consejo de Gobierno que ese mismo día se celebró, va a permitir al Ayuntamiento de Miranda aligerar al menos en una parte la carga financiera que arrastra desde hace dos años en el pago de las obras de rehabilitación del teatro Apolo.
Y es que Presidencia ha adoptado la decisión de dotar al Ayuntamiento mirandés con una subvención directa, que bajo el concepto de «ayuda de cohesión territorial», se refleja en el documento, y permitirá al Consistorio ingresar antes del 31 de diciembre 300.000 euros procedentes de la Junta.
Aunque la cantidad no tiene destino obligatorio, desde el Ayuntamiento la van a destinar «de forma íntegra» a pagar las obras de rehabilitación del espacio cultural, ya que en la práctica este dinero va ser parte de los 2 millones de euros que la Junta de Castilla y León se comprometió a pagar para cofinanciar las obras (un 30% del total), compromiso que hasta la fecha, y desde que comenzaron los trabajos en el año 2010, no ha podido cumplir ante la necesidad de formalizar el pertinente convenio y ante los problemas presupuestarios derivados de la crisis económica, que han hecho que la Administración regional dejara en suspenso de forma temporal algunas de las obras a financiar, entre ellas el Apolo.
Los 300.000 euros que en pocos días van pasar al haber del Ayuntamiento son tremendamente bien recibidos en el Consistorio, que a través del alcalde, Fernando Campo, ha trabajado de forma directa con el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, en abordar este asunto en busca de alguna fórmula que permitiera al Consistorio relajar la carga financiera, ya que hasta la fecha ha asumido de forma íntegra tanto su parte como la de la Junta (un 40% del total de la obra), mientras que el Ministerio de Fomento aporta el 60% restante del presupuesto.
Un paso
Las conversaciones mantenidas en la últimas semanas entre los dos dirigentes han dado buen resultado, y si bien este acuerdo es solo un primer paso y una fórmula que podría llamarse de urgencia, al menos se percibe desde el Consistorio «como un avance que hace pensar en que se puede desbloquear un tema que permite de esta forma seguir trabajando en las obras del teatro», dice Campo, reconociendo el gesto de la Junta, «hay voluntad de abordar ese tema dentro de las dificultades existentes», dice.
Y es que hace pocos meses se daba todo por perdido desde Miranda, cuando tras ver que en las cuentas regionales de 2012 no había partida, hecho que se reprodujo en las de 2013. Esto dejaba al Consistorio como único encargado de afrontar el 40% de los trabajos (2.520.000 euros sobre un coste total de 6.300.000 euros), lo que incluso llegó a poner en peligro la continuidad de la obra.
Con todo, y en base a un acuerdo entre el Ayuntamiento y el Ministerio de Fomento -y tras hablarlo con la constructora-, se logró extender en el tiempo el pago de las certificaciones, de tal forma que si bien la obra en vez de acabar en 2013 acabará en 2014, al menos se lograba que no se parase, permitiendo a ambas administraciones rebajar algo lo presupuestado inicialmente para 2013.