Quizás muchos burgaleses no lo sepan pero en esta ciudad, hace ahora 500 años, se firmó el documento que está considerado como el principal antecedente de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Se trataba de poner coto al maltrato que los ‘conquistadores’ españoles infligían a los pueblos indígenas de América. Las llamadas Leyes de Burgos dignificaron el trato a estas personas y en su quinto centenario la ciudad lo celebra con música y danza.
Porque la 36 edición del Festival Internacional de Folclore, que vuelve a la Plaza de San Juan, va a tener como hilo conductor este hecho sin precedentes y va a homenajear a América Latina con la participación exclusiva (por primera vez desde 1992) de grupos procedentes de aquella parte del mundo.
Un espectáculo de danza, luz y sonido que mañana, el viernes y el sábado se celebrará en la Plaza del Rey San Fernando es el arranque de todas las actividades. Con la puesta en escena del grupo Espliego, guión y textos de Ernesto Pérez Calvo, composición y dirección musical de Javier moreno y la danza del Ballet Folclórico de la Universidad de Colima (México) se explicará cómo era la situación en las colonias y cómo cambió a partir de la promulgación de las ordenanzas para «el tratamiento de los Yndios» firmadas en Burgos el 27 de diciembre de 1512.
Los participantes de este año con el Gran Ballet Argentino, una compañía artística que desde 1963 se dedica a la difusión de la música y danzas de aquel país; el Ballet Folclórico de la Universidad de Colima (México), fundado en 1980; la Compañía de Música y Danza Perú Ritmos y Costumbres; Conjunto Folclórico Guarionex, de Puerto Rico; Compañía Nacional Danzas Guanaguanare (Venezuela) y Acodanza Perú.
Este último grupo, fundado en abril de 2011, tiene como objetivo mantener un baile andino que ha sido declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, la denominada Danza de Tijeras, que se interpreta al ritmo del arpa y del violín con no más de cuatro bailarines.
La presidenta del Comité de Folclore, Regina Peñacoba, explicó que con esta participación se quiere iniciar la inclusión anual de una expresión artística que sea considerada patrimonio inmaterial. En este sentido, Rafael Zamarripa, director del Ballet Folclórico de la Universidad de Colima, en México, recordó que estos días Burgos tendrá dos patrimonios inmateriales, ya que el mariachi ha sido reconocido como tal recientemente.
Junto a ellos presentaron el evento el concejal de Cultura, Fernando Gómez, y el director del grupo Espliego, Ernesto Pérez Calvo, quien ofreció algún detalle del espectáculo que abrirá el festival. En él se recrearán las tensiones vividas hasta la firma de las Leyes de Burgos entre los españoles que pensaban que los indígenas vivían en el paraíso «y no conocían el pecado» y quienes sostenía que no tenían alma y, por tanto, podían ser utilizados en circunstancias de semiesclavitud.