Al pie del nuevo puente de las Rebolledas, Javier Lacalle ha explicado que se trata de una actuación que requeriría expropiar un gran número de terrenos dado que la mayoría de los suelos por los que atravesaría esta nueva carretera no son municipales sino de propiedad privada. Sin embargo se trata de una actuación contemplada en el Plan General de Ordenación Urbana, por lo que no tendría problemas de planeamiento.
El alcalde se ha mostrado optimista y ha asegurado que incluso en el año que queda de mandato se podría iniciar alguna de las actuaciones previas para poner en marcha este proyecto.