Un cross bendecido por la meteorología. La lluvia que se había pronosticado no hizo acto de presencia y tampoco el frío. Unos 8 grados centígrados para una mañana intensa de atletismo en el circuito Virgen de las Viñas, sobre el que volvió a mostrarse una portentosa exhibición de los atletas africanos.

Esta vez la organización del Cross de la Constitución se había empeñado en buscar competencia para los corredores de raza negra pero todo quedó en una buena voluntad. Tanto en categoría absoluta masculina como femenina, los africanos, muy favorecidos también por la generosidad de la temperatura, mostraron sus cualidades de forma incontestable. Su dominio en las pruebas de fondo y medio fondo es incontestable y los muchos aficionados ribereños que se dieron cita en los aledaños del circuito pudieron comprobarlo.

Samuel Tsegay Tesfamariam  (Eritrea) no tuvo rival. Su dominio de la carrera fue abrumador. No tuvo rivales. Inició la prueba arropado dentro del grupo pero no tardó en tomar la iniciativa para ponerse a liderar la prueba que acabó solo, sin tener que preocuparse mínimamente por rivales que pudieran inquietarlo. En cada una de las vueltas que tuvo que trazar, estableció una mayor distancia sobre cada uno de sus competidores. Por momentos hasta dio la sensación de que tuvo que aburrirse.

A Samuel Tsegay Tesfamariam  lo escoltaron en el podio los otros dos africanos que tomaron la salida, Amanuel Mesel Tikue (Eritrea) y Huru Dickson (Uganda), para completar un cuadro de honor monocolor. Muy alejados los atletas nacionales, con Antonio Núñez Sánchez (Bikila) y Gavi Navarro (Atletismo Montilla) como los mejores clasificados. El burgalés Diego Ruiz entró en el puesto once.

En féminas, el monólogo de Rebecca Cheptegei (Uganda) fue similar al del ganador masculino. No lo expresó con una diferencia tan abismal sobre segunda y tercera pero también trazó una carrera relativamente cómoda que ganó con la suficiencia que le caracteriza. Era una de las grandes aspirantes al triunfo y no tardó en ponerlo de manifiesto entrando en la línea de meta sola.

Excepcional batalla por el segundo puesto entre Dolores Checa y Alesandra Aguilar en una pugna competida y preciosa. Sonia Bejarano fue cuarta y la gran Nuria Fernández no defraudó en Aranda. Hizo un cross muy serio, con un ritmo muy continuado y se clasificó en quinto puesto.

 

gana celia. Más allá de las dos pruebas absolutas, el Cross deparó en categoría juvenil una victoria clara de la atleta arandina Celia Antón, que le metió casi medio minuto a la segunda clasificada. Hay muchas expectativas en verla como el relevo de Juan Carlos Higuero y su trayectoria está siendo muy seguida por los arandinos. Hizo una carrera muy seria.

El resto de categorías se manifestó con una elevada participación de niños. Probablemente una de las ediciones con más atletas de las categorías inferiores tomando la salida. 

En síntesis, un cross excepcional en todos los sentidos. Gusta mucho un circuito que, siendo exigente, se hace muy atractivo para los participantes, acompañó una meteorología excepcional para la práctica del campo a través y a la organización, un año más, solo cabe definirla como brillante en todos los detalles. Desde la puesta en escena del propio cross hasta la atención dispensada a los atletas que se siente arropados y muy animados durante todo el recorrido.