La señalización que prohíbe aparcar en el estacionamiento situado en la calle Barrio Gimeno, junto a la Escuela de Relaciones Laborales, ya está colocada. Por tanto, ha llegado el momento en que la Policía Local ya puede multar a todos los conductores que dejen allí su vehículo. Sin embargo, el Cuerpo ha optado por comenzar con las denuncias cero, una práctica que efectúan en aquellos lugares a los que afecta un cambio repentino de normativa. 

Los agentes acudieron ayer a las 15 horas por primera vez a este espacio con el fin de colocar notas informativas en los parabrisas en las que advierten a los dueños de los coches de que empezarán a sancionar en serio en pocos días. La denuncia cero consiste en un simple aviso, que no lleva aparejada multa económica.

Los policías se encontraron con numerosos coches allí aparcados, a pesar de que ya lucen las señales que restringen el aparcamiento. Informaron a todo el mundo. Incluso uno de los agentes tuvo que parlamentar en francés con una ciudadana del país galo que no entendía que estaba pasando.

El Ayuntamiento ha optado por prohibir totalmente el estacionamiento y dejar el espacio solo para los peatones por razones de seguridad. Se han producido conflictos entre vecinos y alumnos de la escuela por aparcar en la zona. Y la medida también es la más idónea, para el Consistorio, por el intenso trasiego de coches que registra el espacio desde que en febrero se permitiera el estacionamiento a todos los vehículos entre las ocho de la mañana y las diez de la noche. Además, constituye un riesgo el acceso de coches porque hay un parque infantil próximo.

Antes de esa medida, a finales de año, se optó por colocar bolardos que solo permitían el acceso al personal del centro, pero no duraron en pie más que unas horas.