Azucena Santillán consulta casi a diario su blog: Ebevidencia.com. Una herramienta de trabajo que se suma a los tradicionales útiles con los que la sociedad ha retratado el campo de la Enfermería. Enfermera moderna y consciente del peso que las nuevas tecnologías juegan en la formación de los sanitarios, acaba de recibir una mención especial en los Premios Enfermería en Desarrollo, de la Fundación para el Desarrollo de la Enfermería, y se encuentra a la espera de conocer si se ha alzado con el primer premio de los galardones Educa. Un reconocimiento a una iniciativa que busca actualizar los contenidos a los enfermeros y enfermeras de mayor edad para darles las pautas de una nueva corriente: la de la enfermería investigadora y científica.

Enfermera de vocación y de corazón, la colaboradora de Diario de Burgos explica que supo desde niña que su misión en la vida era la de cuidar a enfermos. Tras cursar estudios en la Escuela de Enfermería de Burgos y trabajar en varios centros como el desaparecido Hospital General Yagüe dio el salto internacional a la vez que tantas colegas de profesión que vieron relegadas sus expectativas profesionales a marchar sí o sí. En su caso afirma que la emigración le ayudó a cambiar la forma de entender la Enfermería y a captar un conocimiento basado en evidencias científicas que resulta clave en el mundo en el que vivimos.

“Esa es la esencia de mi blog, buscar evidencias científicas que expliquen las razones clínicas basadas en un rigor científico”, destaca la sanitaria. El aprendizaje de esa corriente lo mamó durante su estancia en Londres. “Estuve trabajando desde el año 2000 en la Clínica Saint Mary de Londres en el área de Cardiología”, explica. En la misma clínica en la que Alexander Fleming descubrió la penicilina, la enfermera burgalesa recibió una formación “muy distinta” a la que reciben en España los especialistas en Enfemería. 

El rigor científico que después exportaría al blog no es más que “la búsqueda de la respuesta a nuestras dudas clínicas en estudios de investigación y no en la experiencia o en la voz de las eminencias”, asevera Santillán. Un cambio que busca dejar de lado la repetición de prácticas porque “siempre se ha hecho así” en pro de la búsqueda de nuevas teorías que encajen en lo que necesita el paciente o lo que es mejor desde la base científica.

Base científica

En el día a día, la lección se traduce en la utilización de evidencias científicas. Algo que en la práctica choca con lo que hacen los enfermeros y enfermeras más experimentados, reacios, a juicio de la enfermera burgalesa, a cambiar cualquier forma de ejercer su profesión. “Se ha constatado que la utilización de bases científicas y guías elaborados mediante protocolos de base científica ayudan a tratar a los pacientes”, asegura Santillán. De ahí que desde que pasara por la clínica inglesa haya impregnado una forma de trabajo en la que acomodar su labor con la práctica investigadora.

“En la gran mayoría de países ya se prima el campo investigador y en España también comienza a verse a enfermeros que buscan la base científica. En Castilla y León ya llevamos unos años intentando implementar estas prácticas por medio de cursos. Es un punto fuerte que ya ha visto la Consejería de Sanidad”, destaca.

Santillán es consciente de que el uso de esa base científica se traduce obligatoriamente en una mejoría de los pacientes. “Si la base es mejor los cuidados son mejores y para eso hay que potenciar la investigación”, apostilla. Eso es precisamente lo que busca su blog. Ponerse al lado de la enfermera clínica que no tiene conocimientos científicos actualizados porque cuando los estudió apenas existían y darle todo el material necesario para poder ser como las enfermeras del siglo XXI, que a juicio de Santillán, “están plenamente formadas con los grados y sucesivos másteres y cursos que reciben”.

“Yo me he puesto muy de lado de las enfermeras que les faltan esas herramientas y que no ha tenido tiempo para ir a cursos porque no ha podido o porque en su tiempo no existían”, indica. Con ello ha elaborado un blog muy didáctico que “ayuda” a esas enfermeras que quieren consumir investigación y renovar sus conocimientos.

Miles de visitas

Aprendida la lección y tras concluir su estancia en Inglaterra, Santillán glosó todo su conocimiento en una plataforma digital a la que llamó 'Ebevidencia'. “Comencé en 2010 y reconozco que el blog me ha quitado muchas horas de sueño porque al principio llegué a publicar hasta cuatro entradas por semana”, argumenta. Cuatro años después, ha bajado el ritmo y mantiene al lector con dos o tres entradas mensuales y una actualización semanal de contenidos anteriores. 

El blog de la enfermera busca ayudar al sanitario a investigar y a consumir investigación para poder tratar mejor a los pacientes. Va especialmente dirigido a personas que comenzaron a trabajar en otro tiempo y a quienes acaban de licenciarse. No hay excepción. “A los alumnos de Enfermería les encanta el blog y están en pleno contacto con todo lo que en él aparece”, destaca. Lo sabe de buena mano porque hasta hace apenas unos meses ella misma recomendaba a los futuros enfermeros su plataforma desde su puesto como docente en la Escuela de Enfermería, ahora convertida en facultad dependiente de la Universidad de Burgos.

Elogios no han faltado en este tiempo ni impulsos para seguir. “Una enfermera de Madrid me dijo hace unos meses que yo le había ayudado a reilusionarse con la labor investigadora de la Enfermería y es algo que me llegó al alma. También, a veces recibo correos de enfermeras ya jubiladas que me dan las gracias por ser un poco transgresora y no callarme las cosas que pienso”, reconoce. 

Sin conocimientos tecnológicos especiales y “trasteando” por las distintas páginas de blogs que había en la red, Santillán creó un blog sencillo que pronto hubo de revolucionar al mundo de la Enfermería. “Tengo cerca de 1.500 visitas al día y eso me obliga a costearme de mi bolsillo los gastos que implican tantas visitas”, explica. No se le pasa por la cabeza vender el blog ni ceder sus derechos. “Mira, me han llegado a ofrecer la venta del blog pero siempre he dicho que no porque me siento muy libre haciendo lo que hago”, reconoce.

'Me la pela'

Además de conocimiento sanitario, el blog de Azucena Santillán ha animado a muchas enfermeras y enfermeros españoles a luchar por cambiar la situación “estamental” que vive, a su juicio, el colectivo. En su blog hay un apartado con un título, “que puede parecer vulgar pero que simplemente es una llamada de atención”. 'Me la pela' es una corriente que busca “cambiar la relación de trabajo, que hace un llamamiento a que se escuche a las enfermeras investigadoras y en el que se habla de que los enfermeros y enfermeras tengan voz en el sistema sanitario español”.

“Cuando pasó lo del ébola, en la primera rueda de prensa en la que se informó de la situación de Teresa Romero había una representación de todos los responsables del Carlos III y no había ni un solo enfermero. En ese momento se vio que nos tienen relegados a un segundo plano o directamente a la invisibilidad”, argumenta Santillán. En aquel momento, su voz y la corriente 'MLpela', ya famosa en las redes sociales, llegó a toda España gracias a la intervención que la burgalesa tuvo en el programa de Pepa Bueno, en la Cadena Ser. 

Consciente de que su blog tiene una relevancia cada vez mayor, Santillán espera que sirva para mejorar los conocimientos de sus colegas de profesión y para avanzar hacia una Enfermería más investigadora y rigurosa. Ese es el objetivo de una diplomada en la promoción de 1997 empeñada en luchar cada día por avanzar hacia una sociedad que “valore al enfermero y le de la voz que precisa desde hace décadas”.