Un total de 235 personas, procedentes de quince países, se dan cita hasta mañana en el Museo de la Evolución Humana, con motivo de la celebración del IV Congreso Internacional de Arqueología Experimental que se desarrolla por primera vez en Burgos.

Participantes de países como Francia, Grecia, Polonia, Portugal, Rumanía, Letonia, Rusia, Irlanda, Holanda, Azerbaiyán, Gran Bretaña, México, Italia, EEUU y España debatirán y compartirán ideas y experiencias en un congreso que supone un paso más en la internacionalización del MEH y el Sistema Atapuerca.

Del número de inscritos, 42 personas provienen de fuera de España, lo que supone un 18% del total; se presentarán 75 comunicaciones y 15 posters. Todos estos datos hacen de este congreso internacional «el más grande» en el campo de la Arqueología Experimental hasta la fecha en el mundo. Junto a las sesiones técnicas  se han diseñado toda una serie de actividades destinadas al gran público. El Congreso se configura así como «un buen ejemplo del binomio investigación y divulgación que ha caracterizado al MEH desde su inauguración», según destacó el responsable de Didáctica del Museo, Rodrigo Alonso.

En cuanto al objetivo del Congreso, Alonso indicó que es realizar esta puesta al día a nivel de disciplina pero también, añadió, dar a conocer todas las investigaciones que se realizan a todo el público. En este sentido, resaltó que se considera que la Arqueología Experimental es una «muy buena herramienta» para acercar la ciencia  a la ciudadanía, de ahí -dijo- que se aúnen conferencias, demostraciones prácticas y una exposición con jornadas más técnicas.

El Congreso está organizado por el MEH, Experimenta, la Universidad Autónoma y Exarc.