Bienvenida su majestad

A.C. / Medina de Pomar
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La celebración de la llegada del Emperador Carlos V a Medina de Pomar en octubre de 1556 ha llenado la ciudad durante todo el fin de semana con 8.000 personas que han participado en las propuestas de su extenso programa

Pedro Fernández de Velasco y Tovar (i) recibe al Emperador Carlos V que llega desde tierras cántabras en la recreación histórica vivida ayer. - Foto: A.C.

Medina de Pomar se ha volcado un año más en dar la bienvenida al Emperador Carlos V, el monarca que heredó un imperio y pernoctó en la ciudad en octubre de 1556 de camino a su retiro en el monasterio cacereño de Yuste. Según los cálculos realizados por el Departamento de Turismo del Ayuntamiento medinés, que ha contabilizado a público y participantes en cada uno de los eventos celebrados, Carlos V ha movilizado a alrededor de 8.000 personas durante un fin de semana en que la historia ha vuelto a unir a gentes de distintos rincones de España. Más de 600 cántabros, cacereños, asturianos, vallisoletanos y montijanos se dieron la mano ayer con los medineses para ofrecer un espectacular desfile imperial.

Pedro IV Fernández de Velasco y Tovar, V Conde de Haro, IX Condestable de Castilla, Grande de España y Toisón de Oro, fue quien hizo las veces de anfitrión una vez más, recreando la historia con la que Medina de Pomar y una treintena de ciudades españolas y europeas, quieren lograr que las Rutas del Emperador se conviertan en Itinerario Cultural Europeo. Se vieron espectaculares disfraces de la época y se escucharon músicas de distintos lugares, como la de la Banda de Gaiteros de Villaviciosa (Asturias) que, por primera vez, acudió a la ciudad.

Todas las tierras que ayer tuvieron representación en el desfile están unidas en su pasado por la figura de Carlos V y como explicó el alcalde de Mojados (Valladolid), Pedro Villarreal Rodríguez, «ahora estamos consiguiendo hermandad entre todos, pero lo que pretendemos es transformar esta hermandad en hospitalidad y que gracias a ella nos visiten gentes de distintos países de Europa y de África».  Villarreal se mostró convencido de lo que tantas veces han reiterado desde el Ayuntamiento medinés y es que esta festividad es un gran «escaparate turístico» que esperan ayude a potenciar la llegada de nuevos visitantes.

En Mojados hace ocho años que conmemoran el acontecimiento vivido en 1517, cuando se  encontraron Carlos V y su hermano Fernando II, quienes no se conocían. El segundo reconoció a Carlos V como rey de Castilla y dio paso a un gran imperio. En Laredo, la recreación del desembarco de Carlos V en su último viaje acumula 15 años de experiencia, uno más que el paso de Carlos V por Medina. El alcalde de la ciudad cántabra, Ángel Vega, se mostró ayer convencido de que la apuesta por lograr ser Itinerario Cultural Europeo «está muy bien encaminada». «Confiamos en que en el primer cuatrimestre de 2015, el Consejo de Europa diga que las Rutas del Emperador Carlos V son Itinerario Cultural Europeo», añadió el regidor, quien viendo el espectáculo ofrecido en Medina considera que «los ciudadanos se están concienciando de que esta fiesta nos pone en el mapa europeo y es un puntal decisivo para nuestro desarrollo».

Mientras, el alcalde medinés, José Antonio López Marañón, destacó «el deseo de unión que siempre tiene Medina con quienes nos visitan». Este fin de semana, estos visitantes vieron el mercado renacentista y disfrutaron de los desfiles, la música, el fuego, la pirotecnia o del buen yantar renacentista Todo, a la salud de Carlos V.