El último censo de aperturas elaborado por la asociación Centro Burgos arroja datos reveladores sobre el ritmo de la actividad comercial, hostelera y de servicios de los últimos cuatro años tanto en el casco histórico como en la zona sur. Así, la agrupación de comerciantes contabiliza hasta el pasado mes de septiembre 250 nuevos inicios de actividad, donde también están incluidos los traspasos o cambios de propietarios. Una cifra que se valora de manera «positiva» pero que contrasta con los 152 locales que aún siguen vacíos en estos espacios urbanos.

El estudio de la entidad recoge negocios que comenzaron a funcionar en el año 2012 y que siguen manteniendo la actividad, como son los casos de la Casa de las Musas, de Ágora Café o la joyería Aristrocrazy. Sin embargo, la mayoría de las aperturas que se reflejan en el documento se han dado, según explican desde la asociación, en los años siguientes, mientras que este 2015 está superando a 2013 y 2014 con 40 nuevos comercios computados hasta julio, donde destaca principalmente el textil.

«Los años 2009, 2010 y 2011 fueron los más críticos para el sector y en los que se notaron más cierres», explica la gerente de Centro Burgos, Belén Marticorena, que hace referencia a 2012 como el ejercicio en el que comenzó a notarse cierto movimiento en las calles, que ha llegado a incrementarse en torno al 25 o 30% respecto a los peores años de la crisis económica. En ese punto, además, subraya la importancia de que los datos del último censo, al margen de las cifras, revelan la supervivencia y la consolidación de muchos negocios abiertos. «Superados los tres primeros años es muy difícil que cierren, porque ya se cuenta con una clientela», señala.

Por sectores, las tiendas de ropa, complementos y calzado encabezan el listado de aperturas (61), seguido de cerca de los bares o restaurantes (50). En este punto, Marticorena subraya que en el último año ha sido muy notable el incremento de nuevos comercios del textil orientados hacia un concepto de multimarca y con unas características diferenciadoras. «Tienen unos precios muy competitivos, porque deben luchar contra las distribuidoras», señala, al tiempo que agrega que el centro y la zona sur están empezando a notar un cierto «resurgir» del comercio independiente. También destaca en la relación de negocios recientes, la presencia de tiendas de alimentación o delicatessen, joyerías e inmobiliarias.

 

Plaza Mayor.

En cuanto a las zonas que han concentrado mayor renovación comercial se encuentra la Plaza Mayor, con 16 establecimientos abiertos en los últimos 4 años. De igual modo, ha sido importante el empuje vivido en la avenida del Cid con hasta 17 locales contabilizados; Laín Calvo con 16, los mismos que en la calle Vitoria, o Reyes Católicos, con 14. Ya en la zona sur, las vías con más tirón son, por este orden, Progreso (7), Santa Clara (5) y Miranda (3).

Las 250 aperturas registradas por esta agrupación zonal arrojan una media de más de 60 al año, teniendo en cuenta que aún quedan tres meses para que termine 2015. El ritmo de la actividad es superior al de ejercicios anteriores. Por ejemplo, en 2011 se dieron 37 inicios de actividad, llevándose la palma en aquel momento calles como La Puebla o San Juan, con 6 cada una, que sin embargo contrastan con aquellas en las que no se movió el mercado como La Paloma, Avellanos, Santander, Cardenal Segura o Alonso Martínez.

Pero frente a la actividad incesante, la otra cara de la moneda es la de aquellos locales que siguen cerrados. El censo de Centro Burgos computaba hasta el pasado septiembre 152, tanto en el casco histórico como en la zona sur. Es, precisamente, la avenida del Cid la que acumula más persianas bajadas, hasta 18, de todo tipo de negocios; 9 la calle San Juan; 6 Laín Calvo, 4 Almirante Bonifaz y 5 La Moneda. En la zona sur, la calle Madrid es la que más ha sufrido el fin de actividades comerciales con 7, seguida de Concepción (6) y Miranda (4), en esta última después de que el emblemático establecimiento de La Orensana cerrara a finales de 2014.

Es precisamente este dato, el de los locales vacíos, el que pone de relieve, según Marticorena, que  la crisis económica aún no se ha superado aunque se haya notado cierta recuperación: «Son demasiados porque sigue habiendo una enorme retención del consumo».

La asociación Centro Burgos pone de relieve que la mayoría de las aperturas se dan coincidiendo con los cambios de temporada, por lo que la gerente de la agrupación zonal no descarta que se vean más persianas levantadas de cara a la próxima campaña navideña. Por ello, subraya que será clave lo que ocurra después de estas fechas. «Veremos si la recuperación de la actividad es un espejismo o es algo que, realmente, se mantiene en el tiempo», precisa, en referencia, principalmente, a los establecimientos puestos en marcha en los últimos meses.

 

 

Los que abren

 

Teresa Gariglo | Tería Yabar

 

«Es necesario que haya un abanico de oferta más grande»

 

La historia de Teresa Gariglo es cuanto menos curiosa. Farmacéutica de profesión, decidió vender la botica que regentó durante dos décadas al sentir que ese tiempo había sido suficiente para realizarse como profesional. Así que, decidió abandonar la venta de medicamentos por la de ropa. «Me apetecía hacer lo que me gustaba y la vida me lo permitía», explica esta empresaria. El pasado mes de abril abrió en Laín Calvo Teria Yabar, una conocida franquicia de moda que está teniendo «buena respuesta» por parte de la clientela: «Burgos es una ciudad muy clásica y con poco comercio diferente; es necesario que haya un abanico más grande».

 

María Chippirras | Marietta

 

«El horario te da igual porque trabajas para ti»

 

Nacida en Madrid aunque con raíces burgalesas, María Chippirras dijo adiós hace cuatro años a la capital para trasladarse por motivos personales a Burgos. Estudió Relaciones Públicas y su experiencia profesional siempre ha estado vinculada a la organización de eventos, sector que tuvo que cambiar tras su llegada a la ciudad del Arlanzón. Tras una etapa como dependienta en una gran cadena, el pasado julio abrió su propia tienda de ropa de mujer, un establecimiento multimarca ubicado en Almirante Bonifaz. La experiencia le está resultando de lo más «gratificante»; hasta tal punto que «llega un momento en que el horario te da igual por trabajas para ti».

 

Creoquete

 

«El negocio no requería mucha inversión»

 

Es la primera franquicia de Creoquete en Burgos, un concepto de negocio nacido en Gijón que ahora se exporta a otros puntos del país y que está dedicado a la venta de croquetas gourmet con hasta 16 sabores diferentes. «Nos llamó la atención la idea y no requería mucha inversión», explica su responsable, Rubén Sardiñas, que asegura que el producto está teniendo una «buena aceptación» por parte del público. Situado en la Plaza Mayor, la apertura de este establecimiento ha supuesto la creación de 4 puestos de trabajos, entre ellos el de Carolina (en la imagen).

 

Anunciación Colino (Nancy) | Roy