El que fuera portero del Villa de Aranda entre 2011 y 2014 ha decidido aceptar la oferta ribereña para jugar a las órdenes de Senovilla tras dos campañas en Vigo. Allí, logró el ascenso a Asobal e incluso se ha ganado un puesto en la selección española de balonmano playa, pero ahora ha optado por retornar a orillas del Duero, donde tiene una gran vinculación personal.