El IMC remitió al área de Protección Civil y Emergencias un listado de las más de un centenar de actividades, que bien organiza este área o desde otras asociaciones a quienes subvenciona, para que su responsable les dijera cuáles tenían que contar con un plan de emergencia o de autoprotección, así como a quién corresponde la contratación en aquellos organizados por el Ayuntamiento. Todo ello para cuantificar el gasto y ver si es necesario elaborar un pliego para todos ellos. La respuesta es clara. Todos los espectáculos públicos y actividades recreativas que se desarrollen en establecimientos públicos, instalaciones o espacios abiertos requieren al menos un plan de emergencia, tal y como establece la Ley 7/2006 de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas de Castilla y León.