Los precios de los carburantes han encadenado su tercera semana consecutiva de subidas tras encarecerse hasta un 1,77% en los últimos siete días, con lo que cierran mayo en sus niveles más altos del mes, según datos del Boletín Petrolero de la UE.
En concreto, el litro de gasolina cuesta ahora 1,437 euros, consolidándese en niveles por encima de 1,4 euros, después de haberse encarecido un 1,77% en la última semana. En el caso del gasóleo, el aumento semanal lo ha llevado del 1,43% de subida a 1,348 euros.
De esta manera, los precios de los dos carburantes prosiguen la tendencia alcista iniciada hace 15 días, después de romper con una espiral de cuatro semanas consecutivas a la baja.
Con respecto a principios de año, el litro de gasolina cuesta un 2,64% más, mientras que en el caso del litro de gasóleo es un 1% más barato.
No obstante, los carburantes siguen costando en España menos que en la media de la UE, donde el litro de gasolina asciende a 1,573 euros, y a 1,612 euros en el caso de la zona euro. Por su parte, el precio del gasóleo asciende a 1,427 euros de media de la UE de los 27, y a 1,415 euros en la zona euro.
El menor nivel de precios finales en España con respecto a los países del entorno se debe a que el país, pese a las subidas del IVA, a los mayores impuestos autonómicos y a los nuevos gravámenes al biodiésel, sigue contando con una menor presión fiscal.
‘EFECTO LUNES’. Por su parte, el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, indicó que en «muchos supuestos» se producen pactos de precios entre las petroleras, y se refirió al efecto lunes para señalar que ese día de la semana, cuando se comunican los precios a Bruselas, bajan, y que posteriormente se van incrementando el resto de los días.
El ministro afirmó que, para evitar este efecto, el Gobierno ha introducido cambios en la Ley General de Hidrocarburos, con la finalidad de introducir más competencia en el sector de la venta de carburantes, para que haya más operadores y para que se dificulte así llegar a acuerdos de precios, «que son prácticas que están prohibidas».
Por otro lado, la Comisión Nacional de Competencia (CNC) anunció el pasado miércoles que ha llevado a cabo inspecciones en varias compañías petroleras y en una asociación sectorial ante la sospecha de una posible coordinación en materia de precios y condiciones comerciales en la distribución de combustible de automoción en estaciones de servicio.