Gamonal, en pleno siglo XII

DB / Burgos
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El barrio más populoso de la ciudad continúa celebrando Las Candelas y este fin de semana lo hace retrasando el reloj hasta la Edad Media para revivir las costumbres de aquella época singular

Desde luego, ayudó que en la calle hubiera trece grados. Pero el gentío que se apretujaba por el viejo barrio de Gamonal lo hacía no solo porque casi se podía pasear a cuerpo gentil sino  porque los mercados medievales son un acontecimiento que en cualquier lugar despierta un interés loco que alguien debería estudiar. Quizás se deba a la posibilidad de comprar queso gallego, cecina de León, velas con aromas o jabón de aloe vera para pieles atópicas. Es raro, estamos en una sociedad globalizada y en todas partes hay de todo. Puede ser que ver  a unos mozos disfrazados y haciendo malabares o montar a los críos en un burro sea un buen plan para el sábado por la mañana. O porque cuando el olor a chorizo asado llena todo el barrio actúa como la música del célebre flautista de Hamelin. Que aquí somos de mucho comer.

El caso es que las calles del casco viejo estaban a tope y había que hacer cola en todos los puestos, hasta en los que se vendían gominolas, magdalenas, pendientes y bolsos de cuero. Pero, como por arte de magia, cada vez que se organizaba un pequeño espectáculo, la gente, disciplinada, organizaba un círculo para ver cómo se bailaba en el siglo XII y qué moda imperaba entre las aldeanas de la época o, mucho más espectacular, contemplar a un ave rapaz que, si bien alborotó un poco a las palomas urbanas, también asombró al vecindario pasando de brazo en brazo con una tranquilidad pasmosa. La intención de su entrenador era que el público dejara de temer a estos animales que, de entrada, impresionan un poco. Ayer, en Gamonal, el bicho hizo un montón de amigos.

Hubo, además, magia, combate de caballeros y cuentacuentos, y estaba abierta la exposición de instrumentos de tortura que ya pudo verse el año pasado. La juerga continúa hoy y, a tenor del literal del programa, la cosa promete. A las 11 de la mañana «extrañas criaturas y personajes mitológicos llegan al mercado, nadie sabe de dónde han salido, ¿qué querrán de nosotros?», se preguntan los organizadores, el Consejo de Barrio de Gamonal, que advierte que tales seres llegarán «acompañados de músicos venidos de lejanas tierras». Quien quiera descubrir este misterio tiene que acercarse al barrio antiguo donde también se encontrará danzas y más malabares.