Móviles sin barreras para sordociegos

G. Arce / Burgos
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BVision, el sistema de lenguaje braille aplicado a smartphones y tabletas desarrollado por los jóvenes Ricardo Castrillejo y Sergio Puente, gana la IV edición de los Premios Yuzz Burgos

Ayudar a las personas ciegas y a las sordociegas a manejar con normalidad algo tan habitual y necesario como un teléfono móvil, una tableta informática o cualquier dispositivo tecnológico. Este el logro que permite Bvision, proyecto impulsado por los emprendedores Ricardo Castrillejo y Sergio Puente y que ha sido el ganador por unanimidad del jurado de los Premios Yuzz Burgos, en el que han participado 38 jóvenes integrados en 20 proyectos.
BVision combina electrónica y programación de software para traducir al lenguaje braille los contenidos de un libro electrónico o lo que aparece en la pantalla de un móvil o una tableta y todas las funciones que se van desarrollando. El dispositivo creado por estos emprendedores, que se presenta en dos tipos de productos (Bbook para libro electrónico y Bmóvil para colocar en la parte posterior de los teléfonos y tabletas) traduce a los caracteres en relieve del sistema de lectura para ciegos todo lo que estas personas no pueden ver ni oír.
La idea de Ricardo, que estudia Ingeniería Electrónica en la UBU, surgió tras su paso por el Grado Superior de Formación Profesional. En el proyecto de segundo curso diseñó un sistema para identificar en braille los diferentes productos de un supermercado, permitiendo adaptar sus precios y la información sobre los mismos. 
«Hemos visto que los avances tecnológicos han permitido que la letra digital se imponga sobre la escrita y esto ha supuesto una barrera importante para el colectivo de personas con discapacidad visual». El dispositivo creado «salta esa barrera» y transforma la letra digital en relieve braille.
Detrás de los dos prototipos desarrollados hay dos años de trabajo en casa de este joven de 24. «Lo más complicado es manejar unas celdas que integran este aparato y que me las envía una empresa alemana, la única que las fabrica en el mundo». Su compañero, Sergio Puente, se ha dedicado a la tarea paralela de hacer los estudios de mercado. 
Los prototipos, que tendrían un coste por unidad de entre 200 y 100 euros en el mercado, no tienen aún nombre y pronto serán la razón de ser de una nueva empresa. Tampoco se descarta que la ONCE, que ya conoce este proyecto, también se implique en su desarrollo y comercialización.
Por de pronto, como ganadores del Premio Yuzz Burgos, Ricardo y Sergio viajarán a Silicon Valley, la meca de la innovación mundial y sede de Google, Linkedin o Facebook, del 29 de octubre al 4 de noviembre.
El 6 de noviembre, en la Ciudad del Grupo Santander, los 41 jóvenes ganadores de las fases provinciales presentarán sus ideas ante un jurado integrado por representantes del Banco Santander, CISE y entidades colaboradoras del programa Yuzz, como la Universidad de Burgos y el Centro Europeo de Empresas e Innovación (CEEI) de Villafría. 
Los finalistas optan a premios en metálico (de 30.000, 20.000 y 10.000 euros) y, en el caso de Burgos, a alojamiento gratuito en la incubadora del CEEI durante 6 meses, coworking gratuito durante 12 meses y 3.000 euros aportados por la Fundación Proyecta Burgos para sufragar los gastos de constitución de los 3 mejores proyectos locales, entre otros apoyos.
 
Finalistas.
En la cuarta edición se ha premiado en el segundo puesto al proyecto Planticas, desarrollado por Guzmán Pérez y Javier López, y que es una empresa que diseña y comercializa plantas decorativas y aromáticas para empresas y particulares. En tercer lugar quedó Smart Stories, de Diego Martín y David Postigo, una idea que busca dotar de animación e interactividad a los libros electrónicos, especialmente los destinados a los más pequeños.