"Defensa no puede rectificar en Artillería"

R. Pérez Barredo
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El secretario de Estado de Defensa analiza la situación de los terrenos del acuartelamiento y del Ministerio de Defensa

No dudó, convencido de su responsabilidad para con la sociedad española, cuando la ministra Margarita Robles le llamó para pedirle que fuera su número dos. Asume el desafío con tranquilidad e ilusión, consciente de que la tarea exigirá un compromiso enorme.

Está a punto de cumplirse un mes de su nombramiento. Usted ya estaba fuera de la primera línea política. ¿Le ha cambiado mucho la vida?

Efectivamente ha cambiado mucho. Pero bueno, también hay que considerar que esta es una actividad voluntaria, que yo soy consciente de cuál era el compromiso que adquiría y, desde ese punto de vista, no ha sido una sorpresa.Es decir, he encajado perfectamente este cambio de ritmo porque ya conocía por experiencias anteriores qué es lo que podía significar.

Dijo que no se podía negar. ¿Por tratarse de un reto, por amistad, por compromiso?

Fundamentalmente por compromiso. Yo entiendo que en una circunstancia normal es muy posible que se pudieran tener en cuenta cuestiones como la comodidad personal o cuál es el proyecto de futuro de cada uno. Yo, en este momento, en estas circunstancias especiales que está viviendo España, consideré que mi compromiso personal con la sociedad significaba que no podía decir que no ante la propuesta de asumir este reto. Evidentemente, no responde a ninguna otra característica ni circunstancia, en cuanto que ya he desempeñado otras responsabilidades a lo largo de mi vida y no buscaba yo ninguna otra. No tenía ningún tipo de ambición ni ninguna vanidad insatisfecha sino más bien todo lo contrario. 

No dudó...

Mi compromiso me exigía responder afirmativamente a la propuesta que me hicieron.

¿Siente que es el cargo de más responsabilidad de cuantos ha desempeñado hasta la fecha? 

Todos los cargos lo son. Pero este es muy importante, sí.

No se arrepiente para nada de la decisión adoptada...

En absoluto. No miro para atrás nunca. Asumo mis decisiones.Siempre con plena consciencia de lo que significa y de lo que puede representar para mi vida. Y lo hago a plena satisfacción y con mucha ilusión.

Conoció el Ministerio de Interior y ahora está en el de Defensa. ¿Son muy diferentes?

Hay bastantes diferencias, aunque ambos tienen una característica común: son dos ministerios que, en la medida en que ello sea posible, deben responder a una política del conjunto de la sociedad española, a una política de Estado.Evidentemente con mucha más acentuación en el Ministerio de Defensa, que exige una estabilidad y una certidumbre que seguramente en Interior sea de menor nivel. Pero sí tienen cosas en común, como las materias relacionadas con la seguridad nacional que además exigen una actitud y una responsabilidad muy importante, una seña de identidad de ambos ministerios.

¿Y qué ministerio se ha encontrado en estas semanas?

Que es un ministerio que se caracteriza por su potencia y por el gran talento que atesora. Aquí hay una gran calidad humana entre quienes forman parte de la estructura del ministerio, que tienen mucha experiencia y mucho talento. Es un ministerio estable y potente.

Ya le ha dado tiempo incluso a visitar tropas en el exterior...

Sí. Una de las funciones importantes que desarrrolla el ministerio es participar en la defensa y seguridad en el mundo en la medida en que ello afecta a la seguridad y a la paz de los españoles. España tiene desplegadas tropas en el exterior y es importante que haya un conocimiento, y que los militares profesionales y los empleados de Defensa conozcan y sientan directamente el apoyo que les presta el Gobierno a través del ministerio.

Estuvo en el Líbano. ¿Qué impresiones se ha traído?

En primer lugar, la responsabilidad y la vocación de servicio de todos los miembros de las fuerzas armadas.Su compromiso con su país se concreta en participar en aquellas misiones de mantenimiento de la paz que España asume con responsabilidad propia. En segundo lugar, el prestigio de que gozan las fuerzas armadas españolas en el concierto internacional. En tercer lugar, su gran preparación, su gran calidad humana y profesional. Y son conscientes -y yo también lo soy- de que participan en misiones que entrañan una tensión y un peligro evidente. Y eso exige un estado permanente de vigilancia y de consciencia de la situación que viven, lo cual aporta una responsabilidad suplementaria a lo que es el ejercicio de cualquier otra profesión.

Todo ello en un mundo cada vez más convulso...

Cada vez más convulso y cada vez más cambiante, que desvela cada día nuevas amenazas a las que hay que hacer frente con las capacidades que tienen los estados democráticos.

El terrorismo es una de ellas.

El terrorismo no admite fronteras. Y el que se produce en cualquier rincón del mundo puede afectar a España. Por lo tanto, nosotros también tenemos la obligación con nuestros socios internacionales -y por puro egoísmo nacional- la defensa de la paz en el mundo, que es la defensa de la paz en España.

El Ministerio de Defensa gestiona un presupuesto cercano a los 10.000 millones de euros, el más importante de la Administración General del Estado... ¿Cómo se gestiona algo así?

Con sentido de la responsabilidad y con el convencimiento y el deseo de que en el Ministerio de Defensa se desarrolla una política de Estado, porque la defensa del Estado es un bien público esencial. Por eso es necesario desarrollar una política a medio y largo plazo que goce del más amplio consenso político y social posible.Esa esa la voluntad de la ministra y la mía. Y esa es la voluntad que tiene España. Estamos ante lo que es una política que no debiera formar parte del debate político partidario, sino de ese gran consenso nacional que posibilita el que nuestras fuerzas armadas desarrollen su trabajo en el cumplimiento de las funciones que la Constitución le encomienda. 

¿Aunque sea el más alto de la Administración, es un presupuesto suficiente o escaso?

Yo diría que es escaso.En términos del gasto en relación con nuestra riqueza, con el Producto Interior Bruto (PIB), sólo hay dos países en el sento de la Alianza Atlántica que gasten menos en defensa que nosotros: Bélgica y Luxemburgo. Es decir, España tiene un gasto en defensa reducido.

¿La voluntad ahora será incrementarlo?

Hay unos acuerdos nacionales, a los que España se comprometió, que nos marcan una senda de crecimiento ante un hipotético umbral de alcanzar el 2 por ciento del PIB. Esto es un desideratum de difícil consecución pero que nos indica la necesidad de que, en el cumplimiento de nuestros compromisos internacionales y también para dar satisfacción a las necesidades nacionales, que es lo más importante, desde luego aconsejan que haya un incremento del gasto que proporcionan nuestras fuerzas armadas, las capacidades necesarias para que la disuasión sea real y efectiva y para que puedan cumplir la misión de la defensa de la seguridad nacional y de la paz en el mundo. 

¿El Ejército está modernizado o aún debe mejorar?

El Ejército español se puede considerar moderno en cuanto a que responde a los estándares internacionales pero que desde luego puede mejorar, como todos los ejércitos del mundo.El nuestro tiene prestigio internacional, pero sus sistemas de armas, sus capacidades, tienen que experimentar, de continuo, un proceso de evolución y de mejora en el que ahora estamos inmersos pero que exigen unos recursos económicos muy importantes.

¿En qué tienen pensado en incidir? En la toma de posesión señaló que las necesidades y demandas serán siempre superiores a las posibilidades.

Eso en todo caso. Para que la disuasión sea creíble es necesario estar dotado de la última tecnología. Y la tecnología es cambiante, siempre hay novedades que incorporar. Por eso hay que ser cuidadosos en la gestión prudente de los recursos públicos, de priorizar el gasto. Si no, entraríamos en una dinámica incrementalista, en que el parámetro fundamental siempre sería gastar más de lo que gastamso el año pasado. Y no se trata de eso, sino de elegir aquellas capacidades que realmente las fuerzas armadas necesitan y que le permitan, con flexibilidad, poder atender a un escenario internacional que es cambiante. Ese es el gran reto que tienen las fuerzas armadas españolas. Hay priorizar.

¿Y esas prioridades serán...?

Todos los ejércitos tienen necesidades de incorporar nuevas capacidades militares; tanto la aeronáutica como la armada, como el ejército de tierra tienen programas muy ambiciosos que nos permitirían colocar al Ejército español en una situación puntera con relación al escenario internacional en que vivimos. España tiene como reto tener una autonomía estratégica y al mismo tiempo ser consciente de la importancia que tiene la industria de la defensa para el país. Hay que tener en cuenta que esta industria proporciona empleo (en números redondos unas 20.000 personas) y que a su vez desarrolla una tecnología punta que normalmente, en la gran parte de los casos, es tecnología de doble uso.Es decir, es una tecnología que es aplicable tanto en el ámbito de defensa nacional como en ámbito civil. La participación de nuestras empresas en estos proyectos que son de vanguardia tecnológica también permiten un desarrollo industrial que es muy importante por cuanto generan riqueza. Por cada euro que se invierte en defensa se retornan 2,5 euros. Además de lo que eso significa desde el punto de vista de la generación de riqueza, el crecimiento industrial etcétera. Estamos ante lo fundamental, que es dotar a las fuerzas armadas de las capacidades necesarias para cumplir sus funciones y también siendo conscientes de que en ese proceso la industria nacional y la ecnomía española salen muy beneficiadas. Por eso es importante que España participe en proyectos supranacionales.

¿Le afectará a su conciencia comprar misiles o apoyar la venta de armamento español?

Estoy absolutamente convencido de que la única función que tiene un ejército en un Estado democrático es el cumplimiento de las funciones que le atribuye la Constitución: la defensa de la paz y de la seguridad nacional.Por lo tanto, todo aquello que se realice en este ministerio tiene como única finalidad la defensa de la paz y de España. En ese sentido, no me plantea ningún tipo de problema, sino todo lo contrario: me siento orgulloso de ser partícipe de esta alta misión.

¿Qué significa que el Centro Nacional de Inteligencia vuelva a depender de Defensa?

Es importante, aunque está al margen de mis posibilidades.Creo que la ministra esta misma semana hizo unas declaraciones al respecto.Pero creo que el CNI está muy bien en el Ministerio de Defensa.

EL CNI ha demostrado eficacia en los países en los que España tiene tropas, pero quizás algo menos dentro del país ¿Se puede hacer un CNI más potente dentro? ¿Será uno de los objetivos? 

El CNI responde a lo que son las directrices del Gobierno para proporcionar información e inteligencia necesaria para la defensa de los intereses de los españoles.

Caso Artillería. Usted siempre defendió que, aunque no fuese de su gusto (hubiese preferido que no hubiese allí viviendas), había que respetar los compromisos contraídos. ¿Cuál es su valoración al respecto de lo sucedido en los últimos meses?

La memoria es débil en el ámbito público. Yo respeto todas las posiciones que a este respecto han manifestado diferentes entidades sociales y políticas. Pero yo sí tengo memoria y recuerdo perfectamente, siendo ministro de Defensa José Bono, compañero y amigo, que fui crítico con el convenio que firmó con el Ayuntamiento de Burgos. Yo defendí que esos terrenos tenían que ser libres de edificación. Lamentablemente, en aquella ocasión, esta postura que defendí en 2006 no gozó del apoyo de la sociedad burgalesa.Y en este momento parece ser que esa propuesta sí que tiene cierto eco ciudadano. No sé valorar ni cuantificar de qué importancia.

Escasa... 

No lo sé, pero tengo la enorme satisfacción personal de poder decir, con orgullo en 2018 lo mismo que dije en 2006 ocupando responsabilidades totalmente diferentes. Los acuerdos hay que respetarlos y la ciudad tiene instrumentos para poder conseguir objetivos. Lamentablemente la ciudad no apoyó esa propuesta y ha perdido la oportunidad que tenía a través de la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de poder conseguir esos objetivos. No tengo otra cosa que decir.

Su partido en Burgos apoyó la operación actual. 

Respecto absolutamente la propuesta con relación a esos terrenos. Lo único que tengo que decir a ese respecto es que el Ministerio de Defensa siempre va a colaborar con las instituciones públicas y privadas siempre y cuando se respeten las obligaciones legales que tiene el ministerio en la gestión de su patrimonio.Es que el Ministerio de Defensa tiene la obligación legal de hacer una gestión eficiente de este patrimonio, por lo tanto debe obtener los recursos que los técnicos consideren que son necesarios y que responden a la valoración que se hace de los terrenos. Defensa no puede dilapidar su patrimonio, porque está gestionando un patrimonio que es de todos los españoles y, como es lógico, ese patrimonio no puede tener peor tratamiento que el patrimonio de los particulares; como mínimo tiene que ser igual. Lamento mucho que algo que a mí me parecía bueno para la ciudad no se haya aprovechado. Porque lo cierto es que se podía haber conseguido. 

Y ya no puede haber marcha atrás... 

En este momento, ya se han dado unos pasos administrativos difícilmente reversibles. El Ministerio de Defensa no puede rectificar si no es mediante causa justa. Y parece que no existe.

Lo cierto es que Riodaser sigue sin pagar y lo justifica argumentando que no se ha solventado un asunto del convenio de 2016. ¿Eso cómo se va a resolver? 

Los responsables de Defensa están analizando jurídicamente las manifestaciones que han sido puestas de manifiesto en el expediente y actuaremos ajustándonos a la ley y al derecho.

¿Y qué pasará? 

Defensa inició un procedimiento de subasta de esos terrenos; quien hizo la propuesta y depositó la fianza ha hecho una serie de alegaciones y son esa alegaciones las que están siendo objeto de estudio en el ministerio.

Porque pagar, no ha pagado aún. 

No. Ha depositado la fianza y no ha abonado la cantidad por la que se subastaron los terrenos.

El PSOE de Burgos ha anunciado que se dirigirá a usted para intentar que desaparezca el muro del acuartelamiento. ¿Ha hablado ya con Daniel de la Rosa? ¿Lo estudiará? ¿Hay posibilidades de modificarlo? 

Por parte de Defensa se está en una actitud permanente de colaboración con el conjunto de las administraciones públicas siempre y cuando se respeten los criterios que ya he mencionado. No puede haber ventas que sean a título oneroso.Debemos cumplir la ley. Dicho esto, es público que Defensa ha colaborado en numerosas ciudades del país en la mejora urbana o en cualquier otra cuestión en la que podamos llegar a un acuerdo.En eso no habrá nunca ningún problema.