Reelección. Acaba de finalizar el mandato al frente de la patronal y el jueves 25 comunicará a su ejecutiva la convocatoria de elecciones y su deseo de presentarse. Le ha costado decidir, pero antepone su servicio a Burgos a los sacrificios personales y profesionales que acarrea el cargo.

Miguel Ángel Benavente ha puesto punto (y seguido) a su primer mandato al frente de la patronal. En su haber de estos 5 años: una organización cohesionada, autosuficiente e independiente, que se ha convertido en un pilar estratégico en la refundación de la regional Cecale. En su debe:el liderar de una vez por todas la promoción industrial y económica de Burgos y consolidarse como un referente sólido en estos tiempos de grandes incertidumbres.

¿Cuándo va a convocar las elecciones?

Las fechas no están muy regladas en nuestros estatutos, pero ya han finalizado los cuatro años de mandato. El proceso electoral se iniciará a finales de este mes, el jueves 25, cuando me reúna con   el Comité Ejecutivo.

¿Por qué no se ha pronunciado públicamente todavía sobre si optará o no a la reelección? ¿No afecta esta indefinición a la imagen de FAE?

Hasta que llegue el momento oportuno yo no tomaré decisión alguna. Está claro que, esté quien esté, ya tiene un camino trazado. Si estoy yo será el mismo, y si viene otro creo que no tendrá que desviarse mucho...

¿Abre la posibilidad de que se presenten otros candidatos?

Hasta el minuto antes de convocar no tomaré una decisión y los primeros que lo sabrán serán los miembros de la ejecutiva de FAE, que la tenemos convocada para final de mes. Por el momento, no he hecho ningún movimiento, aunque hay mucha gente que se está interesando y pide mi continuidad...

Es que la gente demanda que la patronal tenga una voz fuerte en un momento de gran incertidumbre política e institucional...

Es cierto, la situación del país es muy comprometida y espero tomar una decisión que sea la correcta. Hay momentos en los que tienes que sacrificar tus deseos personales por la responsabilidad ante la situación... A nivel de país e incluso de Burgos capital las cosas están muy indecisas...  Igual hay que hacer caso al dicho de ‘En tiempos de tribulación no hacer mudanza’...

Insisto en que los burgaleses quieren instituciones fuertes y una de ellas es la suya. Coincidirá que es lógico que les preocupe la continuidad de su presidente...

Eso es lo que realmente me está haciendo pensar en hacer un sacrificio, por lo que, por responsabilidad, volveré a plantear mi continuidad al frente de FAE. Insisto, tengo esa responsabilidad...

¿Exige tanto ser representante de los empresarios, dirigir empresas y equipos de baloncesto?

Al final te lleva tiempo... Aquí tenemos un gran equipo humano, empezando por la secretaria general [Emiliana Molero] y siguiendo por todos los que trabajan en FAE. Pero hay muchos actos representativos y también está la patronal regional Cecale, cuya gestión me ha supuesto mucho agotamiento. Es un asunto que se está enderezando, pero ha sido muy cansino porque la mayoría de las reuniones no han sido para avanzar sino para sacar problemas. Gracias a la gestión de Santiago Aparicio [el presidente] se está encaminando, pero aún hay que hacer unas cuantas reformas. Cecale tiene que ser autosuficiente y contar con las mejores personas para gestionarla y representarla.

Y Burgos tiene mucho que decir en esa normalización...

Hemos sido un apoyo importante de Santiago Aparicio. Ha sido un acto de coherencia y lealtad. Las organizaciones deben prevalecer sobre las personas y las organizaciones territoriales sobre las provinciales. Cecale no es la vaca que da leche a todas las provinciales, es al revés y por ello tenemos que ser muy sólidas y estar muy consolidadas.

¿Qué balance hace de sus 5 años al frente de la patronal?

FAE se ha fortalecido, tiene una buena representación e imagen a nivel provincial, regional y nacional. Es de lo mejor que puede haber en una organización empresarial, gracias al esfuerzo de todos y de hacer las cosas bien. Uno de los objetivos que me marqué al entrar es que teníamos que ser autosuficientes y lo hemos conseguido con las cuotas de nuestros asociados. Tenemos mucha tranquilidad a nivel de sostenibilidad, no dependemos de nadie:podemos decir, reivindicar y llevar nuestra voz hasta donde creamos que tiene que llegar porque nadie nos la puede callar por ningún interés creado.

¿La salud económica les estaba condicionando?

Esta claro, y lo vemos en otras organizaciones a nivel regional, que el modelo está cambiando.Si alguien cree que tiene que vivir de las subvenciones está equivocado. Y quiero matizar que la formación que nosotros impartimos no es fruto de una subvención, porque el dinero que la financia se recauda a través de las cuotas que pagan las empresas y que revierten a las patronales que las representan.

En la Junta a veces no ha gustado esa postura crítica que les da la independencia económica.

Puedo presumir que he ejercido de burgalesismo. Es lo mínimo que tenemos que hacer todos los que representamos a Burgos de alguna manera. Así lo he hecho y nadie me lo puede reprochar. Insisto en que nosotros somos autosuficientes y nadie nos puede cerrar ningún grifo.

¿Entiende que hay una mano negra en proyectos como el Parque Tecnológico para que no salgan adelante?

Mientras algo no se desarrolla, por otro lado sí lo hace. Las pocas oportunidades que se dan ahora se colocan donde hay posibilidades. Si Burgos no tiene nada, no se puede hacer nada.Esta claro que alguien se está beneficiando de todo el retraso que arrastramos en infraestructuras... Aquí nos ha tocado siempre lo último. Tenemos mucha inversión en infraestructuras ahora porque somos los últimos...

Sin embargo, sigue habiendo un goteo de inversiones empresariales (el caso de Campofrío es un claro ejemplo).

Efectivamente. Aquí hay mucha seriedad y el compromiso de la palabra todavía es válido. Damos confianza y los acuerdos se cumplen escrupulosamente. Todo lo que se ha hecho en los últimos años ha sido a base de reinvertir los que estamos aquí. El tema de Campofrío es un claro ejemplo:al día siguiente del incendio hubo el compromiso de que renacería la empresa... Fíjese la cantidad de incertidumbre y dudas que se despejaron para miles de trabajadores y para la sociedad burgalesa...

¿Qué le han pedido al Gobierno de Herrera?

Las exigencias son las mismas de siempre. Estamos en una comunidad complicada, con nueve provincia, muy extensa y con poca población. Hay muchos gastos añadidos. A Burgos nadie le ha regalado nada, nos lo hemos ganado a pulso... Somos la provincia más industrializada y creo que eso hay que primarlo y enorgullecerse de ello. Pero no es así, en los últimos años no solo no hemos ganado nada, sino que tenemos serias amenazas como los parques de proveedores [de Palencia, Valladolid y Ávila]. A mí, que lo haga Renault me parece correcto, que lo haga la Junta con el dinero de todos no. Por la misma razón, que nos hagan aquí unos parques de proveedores de segundo o tercer nivel. Tenemos muchos metros para ello en Villalonquéjar. El Ayuntamiento tiene mucho terreno y sería un gran alivio para el consorcio de Villalonquéjar...

¿No les preocupa el clima enrarecido que se vive en el Ayuntamiento y el perjuicio que pueda acarrear a la ciudad?

Si no se atajan cuando se producen, los problemas se enquistan como una infección. En el Ayuntamiento [refiriéndose a la polémica de las dietas del concejal Fernando Gómez] no se ha actuado a tiempo... Si alguien ha cometido una irregularidad, que asuma su responsabilidad. No puede ser que el Ayuntamiento esté prácticamente paralizado y que esté agotando una gran cantidad de recursos por 4.000 euros de dietas o por solo un euro. Si la oposición cree que este señor ha cometido alguna irregularidad, que acuda a la Justicia; y si ha perdido la confianza del alcalde pues, a agradecerle sus servicios...

¿Mientras tanto se hace algo en la promoción industrial?

Poco. La famosa Oficina de Captación de Inversiones no recibió el empuje necesario en su momento. Se quedó en meras intenciones y no se tomó en consideración al profesional que planteamos para que estuviera al frente. No nos gusta el enfoque se está dando al tema desde el Plan Estratégico, y si nos cargamos la Fundación Proyecta, desde FAE nos plantearemos tomar las riendas de la oficina para captar inversiones y proyectar Burgos.

¿Cómo trabajan en esta idea?

El Consejo Industrial, que reúne a las mayores empresas, ha creado unos grupos de trabajo para desarrollar un plan estratégico industrial a 5 años. En esta línea, también estamos barajando la constitución de una fundación que, de manera independiente, trabaje en la proyección de Burgos en el exterior. Así, FAE tomaría las riendas de esta tarea que vemos que en Ayuntamiento no termina de arrancar.  

¿Cómo ven el panorama político nacional? ¿Les convencen los pactos que se están gestando al margen del partido ganador?

España votó moderación, por ello es impensable que podamos tener un gobierno de extremos. Y, por mucho que se disfrace, Podemos es un partido de extrema izquierda... Me sorprende mucho que el Partido Socialista Español -que parece que lo de ‘Español’ se les ha caído hace tiempo- pueda estar en estos juegos... Estos años se ha hecho un grandísimo esfuerzo de todos, hemos estado en la UVI mucho tiempo y el enfermo está en planta. Abrir la ventana ahora para que se nos coja cualquier cosa es tirar por la borda todo el esfuerzo que hemos hecho... Me pregunto qué ocurriría si las personas que ahora parece que nos van a dirigir enviasen su currículum a Infojob..., no sé cuántas empresas les seleccionarían. ¿En manos de quién estamos? El empresario tiene una responsabilidad penal si ha habido una gestión económica errónea, pero el que maneja el presupuesto general del Estado puede tomar cualquier decisión sin pasarle absolutamente nada. A los políticos se les debe exigir lo mismo que a los empresarios.

¿No le parece un poco tibia la reacción del empresariado a los casos de corrupción galopante?

En la corrupción siempre hay que tener en cuenta que el que corrompe se beneficia de algo. Igual que hay que exigir que el corrompido devuelva el dinero, al que corrompe también se le deben aplicar medidas. Las empresas que se han servido de corruptelas para conseguir un proyecto público deben quedar fuera de la contratación pública para toda su vida.

Esos ‘donantes’ son, en algunos casos, integrantes de CEOE.

Las medidas tienen que ser igual de contundentes para uno y para el otro. El que la hace la paga y lo primero que tiene que aparecer es el dinero defraudado, porque es muy fácil. Al PP le faltan muchas cosas, la primera el saber comunicar, porque todo lo bueno que ha hecho no se ha sabido vender. Además, los dos grandes partidos tienen casos de corrupción, pero parece que con lo ocurrido en Andalucía con el PSOE no pasa nada y lo de Valencia es noticia de primera plana... Al final, las personas son las corruptas y con ello, tolerancia cero.

Si triunfa un pacto de izquierdas para gobernar, ¿teme por la reforma laboral?

Creo que es muy complicado cambiarla. Ha creado empleo y, sobre todo, ha mantenido empresas. Antes de la reforma, aquella empresa que entraba en crisis desaparecía. Hemos conseguido que las empresas sigan de pie y si consiguen trabajo, necesitarán más mano de obra. La demagogia es muy fácil, sobre todo al hablar de repartir el dinero que no es de uno. Cuando se llega al Gobierno hay que recaudar ese dinero. Para que alguien reciba algo, ese dinero tiene que venir de otros y todos tenemos que ser solidarios. Los impuestos en nuestro país están lo suficientemente altos y si se toma cualquier medida tendría un coste que hay que afrontar. Lo peor que puede ocurrir es que la gente tire la toalla, que vea que el Estado le va a pagar lo mismo que si estuviera trabajando... Como en los países comunistas.

¿El independentismo catalán daña a la economía nacional?

Es un tema más político que  empresarial. Aunque hay empresarios catalanes que ya se plantean diversificar en otros territorios sus negocios. En este tema, los más perjudicados son ellos. De hecho, se está produciendo un cierto rechazo interno a este tema. Recuerdo que no llega ni al 50% los catalanes que quieren la independencia, aunque parezca otra cosa.

¿Les preocupa el desplome de las bolsas y que vuelva el fantasma de la recesión?

Sí. Estas caída hacen mella y no solo en los inversores. La gente empieza a cerrar la mano y así arranca una recesión. El índice de confianza se ve afectado por estas caídas y también por la incertidumbre política que vive el país. Si no gusta el nuevo gobierno se van a retraer las inversiones empresariales. Ya tenemos el caso del Ayuntamiento de Madrid, que ha perdido a un gran inversor chino  porque no han hecho más que ponerle pegas. Las multinacionales apuestan donde creen que es más ventajoso para ellas. España está en muy buena posición, porque hemos contenido salarios y apostado por nuevas tecnologías. Somos más competitivos pero si el gobierno que venga deroga todo lo que nos ha permito llegar hasta aquí...