El Valencia derrotó ayer al Espanyol y se consolidó como uno de los equipos más completos en el inicio de la Liga española. Así, el conjunto dirigido por el portugués Nuno Espírito Santo se colocó en el segundo lugar de la clasificación, con dos puntos menos que el Barcelona, al cosechar su segundo triunfo consecutivo.

El bloque catalán, por su lado, vive un panorama adverso: acumula dos derrotas seguidas y comparte el último lugar de la tabla con el Levante, que el pasado sábado empató con el Málaga en La Rosaleda, ambos con un punto.

El conjunto ‘ché’ fue efectivo en ataque y sólido en defensa, mientras que la escuadra ‘perica’ no creó excesivo peligro, aunque tuvo su gran oportunidad para meterse en el partido en un gol anulado a Sergio García, con 1-0 en el marcador, en el que la posición del atacante blanquiazul pudo ser correcta.

El calor fue también un factor influyente en el partido, que castigó muchos a los futbolistas de ambos equipos, sobre todo durante la primera mitad.

El bloque local logró asentarse en el encuentro con comodidad gracias al tempranero gol del argentino Pablo Piatti, a los siete minutos del pitido inicial. La sentencia del enfrentamiento se produjo en la segunda mitad, cuando Dani Parejo (min. 63) y una de las revelaciones de la temporada, el ya internacional Paco Alcácer (min. 73), completaron la cuenta goleadora de los valencianistas.

Por su parte, los pupilos de Sergio González, que se encuentra en la cuerda floja, apenas encontraron el consuelo en el último minuto de partido gracias al gol de penalti de Sergio García.