Un día antes de que el Gobierno de Mariano Rajoy aprobara en Consejo de Ministros los Presupuestos Generales del Estado de 2012, el Ayuntamiento de Roa  de Duero cumplió con sus deberes económicos y dio luz verde en sesión plenaria celebrada el 29 de marzo a las cuentas que manejará en el presente ejercicio. En total, la Corporación raudense dispondrá para su funcionamiento durante este año de un total de  2.535.173,19 euros, lo que supone una reducción del 26,69% respecto a las previsiones de gasto de 2011, cuando el presupuesto ya bajó un 19,4% en comparación con el año anterior.

«En el momento en el que estamos hay que apostar por un presupuesto más austero, mirando por nuestra economía. Hemos tenido que recortar de varias partidas y ajustándonos a los tiempos que corren. No puede ser de otra manera», explicó el regidor raudense, David Colinas, quien aseguró que la situación del Consistorio raudense no es diferente de la del resto de instituciones, que se ven obligadas a amoldarse a los tiempos que corren.

Estos recortes se notan de forma significativa en el capítulo de inversiones. Los 953.528,50 euros  con que se ha dotado esta asignación supone una reducción de algo más del 40% con respecto a la que se manejó en 2011. De este dinero, la mayor parte, 640.000 euros, se destinarán a continuar con la ejecución del nuevo pabellón polideportivo municipal proyectado en la zona de Los Nogales.

Sin abandonar este apartado, el presupuesto refleja también un gasto de algo más de 115.000 euros para la puesta en funcionamiento del parque arqueológico construido en la localidad, 150.000 euros para el Plan de Obras y Servicios de la Diputación Provincial, que aportaría el 80% de los mismos, 12.000 euros para diversas actuaciones en el cementerio municipal y otros 15.000 para trabajos de adecuación en la piscina. Cierra esta sección la reserva de casi 21.000 euros para hacer frente a inversiones varias.

Colinas incidió que se ha intentado también reducir al máximo los capítulos de gastos corrientes, que se sitúan ligeramente por encima de los 490.000 euros, y personal, que queda en 506.000 euros, 10.000 euros de lo presupuestado el año pasado. Una decisión justificada sobre todo por el importante recorte que habrá en la llegada de subvenciones para afrontar los salarios laborales y los gastos generados por el funcionamiento normal del Consistorio.

Por último, destacar los algo más de 353.000 euros que se destinarán a hacer frente a la deuda municipal. «Vamos pagando los préstamos que tenemos que pagar. Lo que tienen una carga financiera más alta los queremos quitar cuanto antes. Pero son asumibles», recalcó el primer edil.

INGRESOS TOTALES. Respecto a los ingresos, los impuestos, tanto directos como indirectos, y las tasas, precios públicos y otros ingresos proporcionarán la mayor parte del dinero, prácticamente el 50% del presupuesto municipal, casi 1,2 millones de euros. No obstante, insistió Colinas, ha sido necesario adaptarse a la reducción de subvenciones para personal y gasto corriente. Es este apartado se contemplan, además, los 24.000 euros que aportarán los ingresos patrimoniales y los 4.000 que se espera obtener mediante enajenación de inversiones reales.

Dentro de los ingresos de las operaciones de capital aparece contabilizado el crédito que se solicitará por valor de 259.925,95 euros. Un dinero que se destinará a hacer frente a los pagos pendientes con proveedores y para el que se ha acudido al Plan de Ajuste Económico convocado por el Gobierno de Mariano Rajoy. «Con este dinero se cubre todo lo que debemos a proveedores. También va incluido el pago de unas obras que teníamos presupuestadas y para las que teníamos concedida una subvención que no hemos recibido», incidió Colinas.

Este año, sin embargo, y al contrario de lo que ocurrió en el ejercicio anterior, cuando sí que se contabilizaron 500.000 euros por este concepto, se ha decidido no incluir el dinero que el Ayuntamiento de Roa reclama al Ejecutivo central por las obras de acondicionamiento y consolidación que llevó a cabo en algunos lienzos de la muralla medieval de la localidad y que, al ser el Gobierno estatal su titular, debería haberlas acometido y pagado él.