Decir que en Burgos hay una gran afición a las jotas y a las danzas tradicionales no es aportar nada nuevo. Insistir en que esta provincia conserva una variedad y riqueza folclórica envidiables tampoco resulta un descubrimiento. Y recalcar el gran trabajo divulgador que desempeñan los grupos existentes supone más de lo mismo. Pese a ello, apuntarenos algunos datos para demostrar que no mentimos: ayer se celebró con gran éxito en un polideportivo del Plantío lleno el 33 Festival de las Marzas, que dio comienzo puntual a las 19,30 horas. Pues a las 16 horas ya había público haciendo cola para coger los mejores asientos; y a las 21,45 horas, al final de esta entrañable cita, el pabellón seguía a rebosar de público de todas las edades. Sí, de todas las edades.
Si esta fiesta mayor burgalesa tuvo un arranque natural, cantando las Marzas (en este caso, por vecinos de Mecerreyes), también fue previsible el cierre, pero no por ello menos emotivo y vistoso: 144 bailarines más los tetines y danzantes bailando la Jota burgalesa. Y con varios asistentes todavía con lágrimas de emoción en los ojos, llegó el Himno a Burgos, que hizo de broche de oro a este encuentro, orgullo del folclore y de esta tierra.
Tanto en la pista-escenario como en las gradas hubo la esperada y también tradicional mayoría femenina, acentuada ayer por coincidir con el partido del Real Madrid. No faltaron asistentes que consultaban de vez en cuando el resultado en www.as.com, ni los que discretamente encendían una pequeña radio con auriculares. En el Bernabéu ganó Cristiano y compañía y en el Plantío, el folclore, la ilusión y el trabajo bien hecho de cientos de niños, jóvenes y adultos. Y además por goleada.
Este festival lo organiza, y con gran acierto, el Comité de Folclore, con la colaboración del IMC.
La cita fue en la capital, pero en el polideportivo estuvo presente toda la provincia. En los asientos y en el origen de los bailes. Y es que sonaron y se danzaron piezas de todos los rincones, desde Las Machorras hasta La Ribera. Lo hicieron con gran entusiasmo los Amigos de la Dulzaina, Danzantes de Burgos, Justo del Río, Tierras del Cid, Diego Porcelos, Estampas Burgalesas, Nuestra Señora de las Nieves y Los Zagales.
Y para cerrar esta crónica, ahora sí, una noticia: hay mucha cantera para el folclore.