Más extraño no pudo ser el verano para el baloncesto en Burgos. Lo que comenzó con un ascenso en las pistas, el tercero consecutivo, a Liga Endesa siguió con la ya tradicional lucha entre directivos del Tizona y la ACB y continuó con la habitual negativa de la máxima competición a inscribir a los azulones. Hasta aquí, lo ya sabido y casi intuido recordando los dos veranos anteriores. Lo anormal vino a continuación, cuando el Autocid Ford renunció a seguir compitiendo, nadie se hizo cargo del proyecto y, cuando parecía que Burgos se quedaba sin baloncesto de élite, surgió por el impulso de un grupo de empresarios y un ofrecimiento federativo un nuevo club ocupando el lugar dejado por el Tizona.
Un vaivén continuo de emociones que impidió que siguieran en la capital jugadores como Albert Sàbat (que una vez llegada la oferta de ACB; posiblemente hubiera emigrado igualmente), Lluís Costa, Miquel Feliu o Michel Diouf de incontestable categoría. O que regresaran otros como Pep Ortega, que sigue teniendo ascendente en el corazón de los aficionados burgaleses. Solo Anton Maresch sobre la pista y el técnico Andreu Casadevall desde el banquillo recuerdan el glorioso pasado inmediato vivido en El Plantío, donde ahora habita un nuevo proyecto joven, jovencísimo, que da sus primeros pasos.
Pocas conclusiones definitivas se han podido sacar hasta la fecha de hasta dónde puede llegar el San Pablo Inmobiliaria. Apenas un mes antes de que empezara la LEB Oro aún se estaba confeccionando el equipo, la pretemporada ha sido breve, las diferentes lesiones no han permitido a Casadevall trabajar en las condiciones ideales hasta hace apenas siete días y, por tanto, los primeros partidos han permitido dejar ya algunas conclusiones, pero no suficientes como para conocer el nivel real del equipo.
En el debut ante el Barça Lassa B el equipo dejó buena impresión durante al menos 30 minutos; en Pamplona fue muy superior y ante el Actel Força Lleida... bueno, difícil decir algo de un partido tan aburrido y descafeinado. Se intuyen buenas maneras de Peciukevicius en la dirección, Rafa Huertas seguirá siendo un sensacional jugador y Matija Poscic ha dado al Miraflores el primer MVP de su historia.
Conocido todo esto, al San Pablo le vienen por delante 3 semanas de gran exigencia, un auténtico examen de capacidad. Cinco partidos en 23 días ya es una exigencia física importante, pero a ello se suma la entidad de los oponentes, entre los que estarán los que son situados, en general, como grandes favoritos a luchar por el ascenso: Quesos Cerrato de Palencia, Melilla, Cafés Candelas Breogán y Palma Air Europa; con Leyma Coruña entre medias.
Mañana, el Quesos Cerrato de Dani Rodríguez, Romá Bas y Urko Otegi, dirigidos desde el banquillo por Porfi Fisac, será la primera piedra en el camino. En una semana visitarán El Plantío Eloy Almazán, Héctor Manzano o el exazulón Asier Zengotitabengoa con el Melilla. El miércoles 11 de noviembre, tras el desplazamiento azulón a La Coruña, regresará a Burgos Dani López al frente del Breogán acompañado por Rakocevic y Wright y el domingo 15 esperará en el Polideportivo de Son Moix Miquel Feliu secundado por Alvarado, Richi Guillén y Javi Lucas.
¿Qué se puede exigir a los hombres de Casadevall? De momento, únicamente se espera de ellos que sepan competir, que mantengan en todos los encuentros opciones de victoria y que mantengan la intensidad necesaria para dar la cara ante cualquier oponente. Suena a tópico, pero es la realidad. Exigir en estos momentos un número determinado de victorias, como se haría con 'los grandes', no resultaría realista.
Sin lugar a dudas, este 'Tourmalet' competitivo llega demasiado pronto para el equipo de Casadevall. Con solo mes y medio de entrenamientos, apenas una semana trabajando todos juntos tras la recuperación de Huertas y ante planteles con experiencia, aspiraciones y una preparación óptima, la exigencia puede pasarle una dura factura al San Pablo Inmobiliaria. Tiene calidad, indudablemente, el bloque de Casadevall y puede que acabe por no tener nada que envidiar a los aspirantes anteriormente mencionados, pero es aún pronto. Eso sí, en pretemporada ya dio la cara ante Palencia en la Copa de Castilla y León, lo cual es un muy buen presagio no tanto para la visita al Marta Domínguez como a largo plazo.
Con el San Pablo se corre el riesgo de que la paciencia sea escasa. Es un equipo nuevo, un proyecto nuevo, pero una gran mayoría de aficionados ha interiorizado acudir cada viernes a El Plantío para ver a un equipo aspirante a todo y cuesta cambiar el chip y aceptar la nueva situación. Por mucho que lo indicado en el primer párrafo invite a dar tiempo y tener calma.
Resulta humano ser impaciente. pero para quien tenga la tentación de pitar, desesperarse o desanimarse si los resultados son negativos en los próximos 23 días, un recordatorio. El Autocid Ford Burgos ganó la temporada pasada solo 2 de sus 6 primeros encuentros oficiales. Y recordemos que le acabó sobrando un partido.