Aunque el pasado mes de diciembre, el equipo de Gobierno no apoyó una proposición del PSOE para declarar la provincia libre de fracking, una encuesta posterior remitida a los ayuntamientos (a la que se comprometió el PP en aquel Pleno), le ha hecho cambiar de opinión y ayer, la Junta de Gobierno se posicionó contra la técnica de fractura hidráulica en sintonía con la postura mayoritariamente de rechazo mostrada por las corporaciones de la provincia en dicha consulta. Y es que el 59,75% (138 ayuntamientos de los 231 que han contestado a la encuesta) han mostrado su rechazo al fracking, mientras el 0,87% (2 corporaciones), lo han hecho a favor; un 27,27% no tiene postura oficial y el 12,12% no contesta.
Por otra parte, el 90% de los ayuntamientos se han mostrado a favor de que la Diputación se posicione formalmente en relación a los proyectos de investigación de hidrocarburos mediante el fracking, por tan solo el 4,33%, en contra. Con esos datos sobre la mesa, el PP no ha dudado en ponerse del lado de alcaldes, concejales y vecinos, ya que la preocupación en el medio rural no es tanto una tema político como social y medioambiental.
Este posicionamiento del equipo de Gobierno del que dio cuenta ayer el portavoz, Borja Suárez, apoyado por los diputados y alcaldes de Medina y Canicosa, José Antonio López Marañón y Ramiro Ibáñez, también tiene que ver mucho con la desinformación sobre este proceso, aclararon los diputados, aspecto éste de la falta de información del que también se hacen eco los ayuntamientos en la encuesta. En todos caso, Suárez aclaró que la Diputación no tienen territorio, por lo que tampoco puede entrar en tema de concesión o denegación de licencias que es competencia de cada Ayuntamiento. Borja no dejó pasar la ocasión para criticar al PSOE y más en concreto a Patxi López que, dijo, abrió el ‘melón’ cuando era lehendakari, apoyando los proyectos de investigación. Ya en el Pleno, Suárez volvió a recriminar a López; el diputado socialista Javier Lezcano, le acusó de faltar a la verdad.
TREVIÑO
Por otra parte, Borja Suárez aseguró ayer que el Grupo Popular está tranquilo sobre el tema Treviño, días antes de que el Ayuntamiento inicie los trámites para la segregación de Burgos y Castilla y León y su integración en Álava. Suárez reiteró que están «suficientemente claras las garantías de la Constitución al respecto de los enclaves» y recordó que el Estatuto de Autonomía ‘blinda’ la posibilidad de segregación del enclave treviñés.
Borja Suárez añadió que el presidente Rico habló el jueves con su homólogo alavés, tras haber recibido éste último a los concejales que defiende la segregación.