Innovación no es un término cargado de buenas intenciones, que suena bien en cualquier foro empresarial y al que todo el mundo apela para salir de la crisis. Innovación, por lo vivido y escuchado en la mañana de ayer en el Palacio de Saldañuela, son cuatro empresas burgalesas consolidadas -Johnson Controls Autobaterías, Naturae, Ecoalia y Trasluz- que han logrado con el desarrollo de nuevos procesos un impacto económico en sus resultados y en su entorno, consolidando, muy especialmente, un total de 315 puestos de trabajo en la provincia. Por eso han sido distinguidas con los Premios FAE Innovación 2013.
Elementos tan cotidianos y habituales como la batería de un automóvil, los hongos, los residuos orgánicos o la ropa han sido valorados y reinventados para modificar producciones, dar resultados y tener un impacto económico en las empresas y en nuestro día a día. Todos los que recogieron el premio ayer (Eduardo Quintanal, por Johnson Controls Autobaterías;Juan Manuel Sanz, por Naturae;José Luis Alonso, por Ecoalia;y Javier Martínez Zaldo, por Trasluz) reconocieron que nunca son procesos sencillos ni lineales, sino que van aflorando a base de errores y aciertos, con la constancia de equipos que anteponen la ilusión ante cualquier contratiempo. Así ha ocurrido con la tecnología start-stop del fabricante de baterías de Villalonquéjar, con el principio activo de los hongos para alimentos saludables de Naturae;con el procesamiento de residuos orgánicos alimentarios de Ecoalia;y con el software que permite la total trazabilidad de la ropa infantil y juvenil que diseña y confecciona Trasluz, desde su fabricación hasta el consumidor último saltando fronteras internacionales.
«España es un innovador moderado, con lo cual, tiene mucho recorrido hacia adelante y aún le queda mucho por hacer», apuntó la directora general de la Agencia de Innovación, Financiación e Internacionalización Empresarial de Castilla y León, Mar Sancho, que cerró el acto de entrega de los premios en presencia del alcalde, Javier Lacalle;el subdelegado del Gobierno, José María Arribas;el presidente de FAE, Miguel Ángel Benavente;y el director general de la Fundación Caja de Burgos, Rafael Barbero.
Sancho demandó la participación empresarial para apoyar las políticas de I+D, que se focalizan en una serie de sectores y tendrán apoyo de los fondos europeos.
El director general de la Fundación Caja de Burgos, patrocinadora de los premios, recordó por su parte que la vocación de la institución que representa es seguir apoyando a las empresas y los emprendedores. «Queremos estar donde reside la innovación, donde está el germen de los nuevos proyectos y las nuevas empresas».