Las negociaciones de cara a sellar un pacto tripartito entre PP, PCAL y CCD que garantice la gobernabilidad y la estabilidad del Ayuntamiento de Aranda para lo que resta de mandato va por buen camino. Las tres formaciones políticas volvieron a reunirse el pasado jueves ya de  una manera más relajada tras el primer encuentro del pasado martes. Una cita en la que no hubo grandes avances y cuya principal conclusión es que por el momento no se ha roto la baraja, ya que los tres grupos continuaron hablando  para llegar a un acuerdo. Las tres formaciones quedaron emplazadas para una nueva reunión la próxima semana y el desenlace  podría conocerá este mismo lunes.

Una vez puestas las cartas sobre la mesa, la pelota se encuentra  sobre el tejado de la alcaldesa, Raquel González, que deberá determinar si finalmente acepta las condiciones impuestas  por centristas y castellanistas para sumarse al equipo de gobierno. Inicialmente, según diversas fuentes consultadas por DB, el acuerdo no presenta mayores problemas con el edil del CCD, Alfonso Sanz, quien reclamaba un puesto  en Junta de Gobierno y las delegaciones de Comercio y Turismo, y a quien podría habérsele ofrecido también la Concejalía de Deportes y su reingreso en el PP si se porta bien este mandato.

En el caso del PCAL, que ha exigido la Concejalía de Urbanismo con una total autonomía, el principal escollo parece estar en la resolución del conflicto de la plaza de toros, donde los castellanistas parecen firmes en su postura de «tolerancia cero» y de exigir al empresario el cumplimiento de todas las  obligaciones contraídas, mientras  los populares parecen más favorables a concesiones para zanjar de una vez por todas este asunto y legalizar esta instalación.

En el encuentro a tres bandas del jueves los representantes de los tres grupos aprovecharon para comentar cómo había ‘caído’ en sus respectivas formaciones el rumbo  de las negociaciones, sin que, pese a que parece que un sector del CCD no es muy favorable , se expusiera por ninguna parte alguna problemática concreta.

En el caso del PCAL, el portavoz, José Ignacio Díez, asegura que  están totalmente cohesionados en la postura que defienden. «No tenemos discrepancias internas y estamos todos a una. Lo que se está presentando es con el consenso unánime del grupo», sostiene.

«La derecha de siempre»

Por su parte, el primer partido de la oposición considera que el planteamiento del pacto es un «mero reparto de poder pero no para que Aranda progrese». Pese a ello el portavoz socialista, Luis Briones, pidió agilidad para alcanzar un acuerdo para garantizar la estabilidad «necesaria» del Ayuntamiento y comenzar a trabajar «porque han perdido nueves meses».

En su opinión, dado que CCD, a cuyo concejal acusó de perseguir únicamente su reingreso en el PP, y PCAL en la práctica ya venían apoyando al equipo de gobierno «en lo poco que se ha hecho», es bueno que el proyecto «entre la derecha de siempre» se concrete para que de una vez por todas haya claridad, se sepa quien gobierna y quien está en la oposición «y que la gente no se deje engañar por quien de cara a la elecciones se viste de progresista para quitar votos a la izquierda pero al final pacta siempre con el PP».

En cuanto al contenido del acuerdo, lamentó que solo ataña al Plan General de Ordenación Urbana, la plaza de otros y los presupuestos, olvidándose de las infraestructuras. Sobre coso se cuestionó si el PCAL «se atreverá a presentar la auditoría que prometió en programa electoral».