El secretario autonómico del PSOE, Julio Villarrubia, se mostró ayer rotundo en afirmar que su partido no negará el debate en torno al proyecto de Ley de Ordenación del Territorio, que ayer dio luz verde la Junta, pero remarcó que actualmente su partido votaría en contra de su aprobación, si bien no precisó si presentará una enmienda a la totalidad.
Según explicó, el proyecto aprobado «contiene diferencias sustanciales» con el modelo socialista. «El PSOE no podría apoyar este texto porque no ordena el territorio» en lo que concierne a las personas, los servicios, los derechos o la lucha contra la despoblación, al tiempo que, a su juicio, no disminuye las competencias de las diputaciones.
Además, Villarrubia se mostró crítico con las afirmaciones del consejero de la Presidencia y portavoz de la Junta, José Antonio de Santiago-Juárez, en las que aseguraba que el proyecto contiene todo lo incluido en el acuerdo básico alcanzado entre la Junta, el PP y el PSOE en esta materia. Según el dirigente socialista, en ese documento se suscriben «solo unos pocos aspectos» pero no se recoge el «esqueleto» entero.
«No hay acuerdo, ni consenso, es el documento que unilateralmente ha presentado la Junta», subrayó. Con ese texto, insistió, y a día de hoy es «inviable totalmente» que se vote a favor. No obstante, recordó que el PSOE «jamás estará ausente del diálogo en un asunto de Comunidad» y decidirá si plantea la enmienda a la totalidad en función de cómo sea esa oferta de diálogo.
«Recogemos el guante para entrar en los contenidos e intentaremos mejorar muchos aspectos», afirmó, a la vez que criticó que el modelo planteado por la Junta «no garantiza las prestaciones, sino que se producen recortes añadidos sobre los existentes».
En su exposición, el secretario autonómico reiteró que la visión del PSOE pasa por una ordenación de los servicios a favor de las personas y no de territorio o de hectáreas. «Si no hay personas, desarrollo del empleo o servicios no hay nada que ordenar». «En la pirámide del debate tienen que estar las personas y, en especial, las del mundo rural», subrayó.
Reforma Local. En este sentido, recordó que el proyecto de la Junta sí es «incompatible» con el anteproyecto del Gobierno de modificación de la Ley de Bases y, como tal, afectará porque se trata de una ley orgánica de rango superior. Esa ley supondrá que desaparezcan el 90 por ciento de los municipios de Castilla y León y se les considera «un problema» desde el punto de vista económico y financiero. Por ello, consideró que el proyecto regional mantiene aspectos coincidentes con el estatal.
Por lo tanto, mostró su «radical y total oposición» al anteproyecto del Gobierno de España.