Un cambio de Gobierno como el que acaba de llevar a Pedro Sánchez a la presidencia del Gobierno no solo afecta a la camarilla de La Moncloa. Implica a cientos de cargos por toda España, y en esta ocasión la forma repentina en la que ha producido supone un terremoto político que en pocos días tendrá consecuencias directas, también en la provincia de Burgos.El primer movimiento es evidente e incluye a todos los delegados y subdelegados del Gobierno. En el caso burgalés, Roberto Saiz está en el cargo desde febrero de 2017 y tendrá que dejarlo porque es un puesto de confianza reservado para la gente del partido en el poder.La segunda derivada, que sería más llamativa, sería el posible nombramiento de Ander Gil en una encomienda de alta responsabilidad en el nuevo Gobierno del PSOE.