El Ayuntamiento de Burgos se encuentra inmerso en el último tramo de la negociación con CaixaBank para la adquisición del edificio que la entidad financiera tiene junto a la Casa del Cordón. Un inmueble de entre 2.000 y 3.000 metros cuadrados (repartidos en 4 plantas), que hace esquina con la calle La Puebla, que antaño estuvo ocupado por empleados de Caja de Burgos y que ahora, tal y como avanza el alcalde, Javier Lacalle, tendría como destino la concentración en un mismo espacio del servicio de Instalaciones Deportivas, del área de Movilidad y de la Oficina de Atención al Contribuyente (BAC). Eso sí, siempre y cuando el equipo de Gobierno, que no alcanza la mayoría absoluta en el Pleno, encuentre los apoyos en la oposición que le permitan aprobar la operación.

Lacalle detalla que «las conversaciones con CaixaBank se iniciaron hace ya más de un año» y, tras asegurar que la entidad financiera ha rebajado sensiblemente sus pretensiones iniciales, defiende que la compra del inmueble sería una gran oportunidad para concentrar servicios municipales que en este momento se encuentran dispersos por la ciudad.

El alcalde, que prefiere no concretar aún el importe por el que se podría cerrar la operación, sí detalla que la compra supondría un desembolso de «varios millones de euros» que el Ayuntamiento sufragaría a través de una inversión plurianual «a tres o cuatro años».

Para tratar de minimizar el impacto económico de la compra, el Ayuntamiento impulsaría, a su vez, la venta de los espacios donde se ubican en la actualidad los servicios de Instalaciones Deportivas (al inicio de la avenida del Cid) y de Movilidad (en la plaza Virgen del Manzano).

Sobre las posibilidades de poder reunir los suficientes apoyos para sacar adelante la operación, comenta que se ha puesto en conocimiento de algún grupo político, aunque deja entrever que esas conversaciones se han desarrollado en un contexto informal y sacar conclusiones de las mismas sería en este momento precipitado.

Lo que sí advierte es que la decisión, sea en un sentido o en otro, tiene que tomarse «en el último trimestre del año». Entre otras cosas porque CaixaBank, según asegura el alcalde, tiene «alguna que otra oferta» por el inmueble, «ha hecho un esfuerzo» para acercarse a las cantidades que estaría dispuesto a pagar el Ayuntamiento y quiere una respuesta rápida.

concentración de servicios. El primer edil reitera su deseo en que se consiga el «consenso político» que permita cerrar la operación ya que, según defiende, la compra del céntrico inmueble permitiría «mejorar las condiciones laborales de los trabajadores y la atención al público» por parte del Ayuntamiento. En el caso de Deportes y Movilidad al unificar los servicios en un espacio que ya está acondicionado, y en el de la BAC para trasladarlo a un lugar que, tal y como defiende, evitaría las incomodidades que existen en la actualidad en la planta baja de la Casa Consistorial.

La adquisición del inmueble, según añade, supondría dar un nuevo paso en la concentración de los servicios municipales. Un proceso que arrancó hace ya muchos años con la ampliación del Ayuntamiento y que continuó después con la construcción del ‘edificio del Morito’ (en la calle Diego Porcelos) y con la creación del centro cívico de San Juan.

Si la compra del edificio prosperase, la idea sería completar el traslado de los servicios a lo largo de 2019.