Los bloques F y G de la barriada Inmaculada, las torres de Juan XXIII que no han realizado obras de eficiencia energética, los unifamiliares de la zona oeste del Crucero y las viviendas construidas en la primera mitad de los años 60 en las calles Caja de Ahorros Municipal, Romanceros, Alfareros y San Francisco, entre otras, tendrá que pasar la inspección técnica de edificios (ITE) el próximo año.

El listado completo se puede consultar ya en el tablón de anuncios del Ayuntamiento y en el siguiente enlace (http://www.aytoburgos.es/licencias-y-vivienda/inspeccion-tecnica-de-edificios-ite/padron-de-edificios-itc-2012).

La concejala Ana Bernabé y el jefe del Área de Arquitectura, Fidel Ruiz, han presentado esta mañana los principales datos de un servicio que se puso en marcha en 2012 y que hasta 2022 afectará a 6.000 edificios de más de 40 años de toda la ciudad. Ya han pasado 4.157, con un alto grado de cumplimiento, según ha destacado la edil responsable. Todos los padrones presentan un porcentaje superior al 90%, el más bajo es el ejercicio más reciente, 2017, con un 92% y el más alto el primero, 2012, con un 99,4%. Bernabé tribuyó este éxito a la labor y la implicación de los funcionarios, que persisten hasta conseguir que las comunidades realicen la IRE. "Queremos que se vaya incorporando como algo necesario e importante en aras al interés general", por lo que evitan llegar al extremo del expediente disciplinario. La premisa es que se realice la ITE, aunque sea tarde.

Con respecto al ejercicio actual, solo un 33,11% de los edificios afectados han cumplido el trámite, aunque Bernabé asegura que "es un porcentaje habitual en estas fechas", ya que la mayoría de las comunidades apuran hasta diciembre para formalizar el documento.

Aquellas patologías relacionadas con la falta de mantenimiento de las cubiertas son las más repetidas, explica Fidel Ruiz. También aparecen problemas en las fachadas, que si bien en ocasiones se pueden solucionar con intervenciones mínimas suelen impulsar a las comunidades a decidirse por una intervención más ambiciosa, con sistemas de aislamiento adicionales. En otros casos, la intervención en la fachada da lugar a la presentación de la ITE de manera voluntaria.