Una pancarta con el lema Burgos con Campofrío, que desde ayer cuelga de la fachada principal de la Casa Consistorial, resume en pocas palabras el sentir de toda la ciudad. El fuego devastador se ha llevado por delante una de las plantas de la industria cárnica con más arraigo pero también ha desatado un tsumani de apoyos y ha conseguido unir a toda la sociedad burgalesa en la lucha por su reconstrucción.

El mejor ejemplo de esa unidad fue el Pleno Extraordinario que ayer celebró el Ayuntamiento en el que por asentimiento se aprobó una moción en apoyo a los trabajadores y directivos, al tiempo que mostraba la disposición municipal a colaborar con todos los medios para facilitar la reconstrucción de la planta e instaba a otras administraciones a hacer lo mismo ante «este desgraciado siniestro».

El alcalde, Javier Lacalle, quiso que fuera el presidente del comité de empresa, Hilario Sancho, el encargado de leer el texto. Sin embargo, emocionado se dirigió a todos los asistentes, entre los que se encontraban numerosos trabajadores, asegurando que «no van a parar hasta que la nueva planta emerja en Burgos». Sus palabras fueron seguidas por una gran ovación. «Es un día en el que todos, empresas trabajadores, instituciones públicas y sociedad burgalesa, debemos dar una lección de superación ante la adversidad y demostrar audacia para afrontar un futuro. Un futuro que solo se concibe remando en la misma dirección para que Campo frío levante de nuevo su planta de Burgos y se aseguren todos los puestos de trabajo que ahora peligran», leyó.

Desde el Partido Popular, Ángel Ibáñez garantizó que el Ayuntamiento estará a la altura de las circunstancias. «Queda por delante mucho esfuerzo», de ahí ese llamamiento a la unidad de todos, para que lo más pronto posible Campofrío vuelva a brillar en todo su esplendor.

Por su parte, el portavoz socialista, Luis Escribano, aseguró que «toda la ciudad pierde» si no se reconstruye Campofrío. «Estamos obligados a adoptar un compromiso sólido y conjunto. Es un problema de interés general y debemos hacer cuanto esté en nuestra mano para solucionarlo».

La concejala de UPyD, Rosario Pérez, recordó que se instará a todas las administraciones a encontrar ayudas que garanticen el suelo a los trabajadores, incluso europeas. «Todos somos Campofrío», resumió.

Raúl Salinero, concejal de IU, aseguró que Burgos se ha estremecido con este duro golpe al corazón de la industria agroalimentaria burgalesa. Sin embargo, en estos momentos se demuestra «de qué pasta estamos hechos los burgaleses». «Campofrío es Burgos y Burgos es Campofrío. Este ayuntamiento os respaldará en esos 24 meses de travesía hasta que la planta vuelva a funcionar. Burgos os apoyará y ayudará».

Todos los grupos municipales mostraron su agradecimiento al los cuerpos de Bomberos y Policía Local, voluntarios de Protección Civil, Cruz Roja, un operativo integrado por 250 personas.

Al término del Pleno, la corporación salió al balcón del Ayuntamiento y desplegó una pancarta en la fachada, donde permanecerá durante unos días como símbolo del apoyo de la ciudad a todas las familias que trabajan en Campofrío, muchas de las cuales se concentraron en la Plaza Mayor.

Al pleno municipal acudieron también el presidente de la Confederación de Asociaciones Empresariales (FAE), Miguel Ángel Benavente; el exalcalde de Burgos, Juan Carlos Aparicio; y el diputado del PP, Máximo López.