Matilde Fernández (Madrid, 1950) está jubilada de la política desde que en 2015 dejara su puesto como diputada autonómica de la Asamblea de Madrid, pero es una voz autorizada para repasar la actualidad de un país en el que gobierna el PSOE de Pedro Sánchez. Ella, que fue ministra de Asuntos Sociales con Felipe González entre 1988 y 1993, cree que el actual presidente debe «trabajar para agotar la legislatura» («y lo está haciendo bien», opina), pero «si le boicotean por todos los lados, tendrá que buscar el momento oportuno para convocar elecciones. Y la responsabilidad no será de él, sino de aquellos partidos que no aprendieron lo que aprendimos las mujeres al inicio de la democracia: a pactar entre nosotras, con los hombres y con las instituciones lo que era importante para avanzar en la igualdad».
Tras Soledad Becerril (UCD), ella fue la segunda ministra de la actual democracia, hace ya 30 años; hoy 11 mujeres integran el Ejecutivo más femenino de la historia de España. «El techo de cristal en el acceso al poder se rompió el año en el que a nivel internacional las mujeres decidimos que íbamos a ir a por el 25% de puestos en los partidos políticos y en los procesos electorales», dijo.
Matilde Fernández abrió ayer la Semana Social organizada por el Centro Ignacio Ellacuria, el Comité Óscar Romero, la plataforma Tender Puentes y Jesuitas Burgos con motivo del 29º aniversario del asesinato de seis jesuitas en El Salvador y lo hizo con una conferencia titulada ‘El reconocimiento de la mujer en la democracia española’.
Antes de acudir a la cita aseguró que la sociedad ha «evolucionado» porque «las mujeres hemos utilizado las artes de pactar entre nosotras, con los hombres y con las instituciones el modelo de España que queríamos y necesitábamos».
Esa lucha conjunta por la igualdad se vio reflejada el pasado 8-M en las calles de toda la geografía nacional. «El sentimiento colectivo de la mujer en este país y en cualquier parte del mundo es que no habrá futuro sin nosotras. Y las mujeres no perdemos oportunidades para decirlo», argumentó Fernández.
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