Hoy ha tocado madrugón. Después de más de dos meses de vacaciones, a los alumnos de Infantil y Primaria les toca volver a cargar con la mochila en toda la comunidad de Castilla y León. Buena parte del alumnado reside en el medio rural. Los cada vez mayores problemas de despoblación son una espada de Damocles que cada nuevo curso amenaza el cierre de escuelas en los pequeños pueblos y la clausura de algunas aulas, incluso, en localidades de mayor entidad. Por lo pronto, y a la espera de que las puertas se abran esta mañana y se materialicen las matrículas, en la provincia este curso 2018-2019 se mantienen las mismas escuelas que el pasado curso, incluida la de Arauzo de Miel, con tan solo 3 niños, gracias a que la Consejería de Educación de la Junta ha decidido este año poner el límite en los tres alumnos, de tal manera que con ese número, se mantendrán las escuelas rurales, contribuyendo con ello, según manifestó el consejero Fernando Rey en su día, a apoyar al medio rural en esa lucha contra la despoblación y evitar el rosario de cierres de escuelas.Esa política ha evitado echar las persiana en los colegios de varias decenas de pueblos en toda la comunidad autónoma.
En la provincia de Burgos, solo Arauzo de Miel, que pertenece al Centro Rural Agrupado (CRA) La Demanda, con sede en Huerta de Rey, estaba en riesgo de suprimirse, lo que no sucederá al menos este curso, a no ser que en el transcurso del mismo varíe el número de alumnos a la baja.
Otras cuatro escuelas rurales tiene pocos alumnos, pero por encima de los tres, con lo cual también los niños corretearán este año por el pueblo y aprenderán en sus aulas. Son el caso de Hontoria del Pinar, que también pertenece al CRAde La Demanda, que comenzará el curso con 5 alumnos, según los datos actuales con que cuenta la Dirección Provincial de Educación; Adrada de Aza, del Centro Rural Agrupado Valle de Riaza (con cabecera en Milagros), que tiene 4 ó 5 alumnos; Castrillo de don Juan, que a pesar de ser un pueblo de la vecina Palencia, pertenece al CRAAntonio de Nebrija (Torresandino), que también tendrá 5/6 escolares y Villahoz, del CRA Monte Arlanza, igualmente, con 5 ó 6 niños.
El director provincial de Educación, Juan Carlos Rodríguez Santillana, valora positivamente el mantenimiento de todas las escuelas en el medio rural, aunque también asegura que se estará alerta porque podría darse algún caso en el que se «ha forzado» la presencia de familias en los pueblos, incluso de emigrantes, que no siempre permanecen durante todo el curso ya que se mueven en función de donde encuentran trabajo. Desconoce si es el caso de alguna de las localidades mencionadas, pero si así fuera, esos números de alumnos podrían variar.